Denuncian a los jueces que demoraron 20 años la causa armas contra Menem
El abogado Alejandro Fargosi, candidato a integrar el Consejo de la Magistratura en nombre de sus colegas porteños, denunció ante ese organismo a los jueces que durante más de dos décadas tramitaron -o durmieron, o desviaron- la causa por el tráfico ilegal de armas a Croacia y Ecuador en la cual el ex presidente Carlos Menem fue absuelto por prescripción la semana pasada. Fargosi recogió los argumentos de los jueces de la Cámara de Casación Penal Federal que consideraron que Menem -y los ex funcionarios, empresarios y traficantes de armas acusados- no habían sido juzgados en un plazo razonable.
“Por eso, vengo a denunciar por mal desempeño de sus deberes a todos los magistrados que resulten responsables, según resulte de la minuciosa investigación y determinación de responsabilidades que pido se inicie de inmediato”, dice la denuncia de Fargosi, a la que accedió Clarín.
Si la investigación y eventual castigo de los agentes judiciales directamente responsables de que se exce- diera el “plazo razonable” no ocurriese, “a la absolución y consecuente impunidad de los allí imputados se sumará la de los magistrados responsables de las gravísimas faltas ocurridas en esa tramitación, lo que reviste a este caso de una enorme gravedad institucional”.
Fargosi habla de “vergonzosos defectos, demoras, dilaciones y errores procedimentales que convirtieron a ese proceso en lo que no debe ser jamás un juicio”. Tomando las palabras de los camaristas Liliana Ca- tucci y Eduardo Riggi, quienes votaron por la absolución de Menem, “es inconcebible que todo el proceso, desde la denuncia, haya durado 23 años.”
“Y también es inadmisible que, como dice el voto de Catucci, se haya ‘dejado de actuar sobre delitos de estricta competencia federal, tales como falsedad documental, malversación de caudales públicos, cohecho, incumplimiento de los deberes de funcionario público, encubrimiento y enriquecimiento ilícito’”. Con los sucesivos manoseos que tuvo la causa, Menem y los demás acusados en cambio fueron juzgados en el fuero penal tributario por el delito de contrabando agravado.
El abogado también cita las consideraciones del juez Riggi, quien en su voto enumera los vaivenes que el expediente tuvo desde el momento mismo de la denuncia que le dio inicio, firmada por el abogado Ricardo Monner Sans en marzo de 1995 a instancias de una investigación de Clarín. Riggi recuerda que el expediente tramitó en la justicia federal hasta el 18 de diciembre de 2001, cuando una serie de fallos de la Corte, la sala I de la Cámara Federal porteña y la sala II de la Cámara de Casación Penal enfilaron la causa hacia el fuero penal económico.
Las bifurcaciones y unificaciones, los planteos de cada una de las decenas de acusados, las resoluciones contradictorias de los tribunales de apelación -a su vez recurridos a instancias superiores- siguieron juntando fojas y consumiendo almanaques. El dispositivo judicial de impunidad cuyos resultados abrumadores están a la vista, funcionó a pleno en este engorroso expediente. ■