El día después, el clásico de los fallos polémicos siguió haciendo ruido
Para el presidente de Racing, “a Herrera le faltó autoridad”. “No informé expulsiones”, dijo el cuarto árbitro.
El día después del clásico no tuvo a jugadores en la tapa de los diarios por sus goles. Más allá del resultado cambiante, del trámite vibrante y de los cuatro goles, se habló más del escándalo que protagonizaron técnicos y futbolistas con los árbitros que del rendimiento de Racing y Boca. La forma en la que reclamaron Guillermo Barros Schelotto y Eduardo Coudet estuvo lejos de los carriles normales. Y hubo quejas desde los dos clubes por la conducción de Darío Herrera, el juez de 33 años nacido en Neuquén.
Víctor Blanco fue contundente. “A Herrera se le fue el partido de las manos en el segundo tiempo. Las divididas eran todas para Boca, le faltó auto- ridad. Debió expulsar a algún jugador de ellos, pero estuvo un poco presionado”, bramó el presidente de la Academia. Y enfatizó: “Nos va mal con Herrera y llama la atención. En la Bombonera nos había pasado lo mismo”. Once veces dirigió el neuquino a Racing con un saldo de tres triunfos, cuatro empates y cuatro caídas.
Blanco habló del complemento, claro. Entonces, Herrera comenzó a compensar porque en el primer tiempo había perjudicado a Boca con sus fallos. Mucho tuvo que ver el asistente número uno, Claudio Rossi. El línea no advirtió un offside milimétrico de Lisandro López cuando partió el remate de Pol Fernández que rebotó en Paolo Goltz y encontró al capitán celeste y blanco resuelto para definir. Era una jugada de VAR. Estaba un pasito adelantado. Posición adelantada, a fin de cuentas, que le puso los pelos de punta al Mellizo.
Hubo otras dos acciones polémicas. Una pelota que Eugenio Mena metió adentro de la cancha cuando había superado la línea de fondo y casi se transforma en el segundo grito de Racing, y una infracción de Renzo Saravia sobre Cristian Pavón que Herrera no cobró. El lateral cordobés estuvo al límite del penal y de la roja.
En el segundo tiempo, el empujón de Lisandro Magallán pudo valer una expulsión. El zaguero central reaccionó luego de una falta de Pol Fernández. Hubo bronca de Racing por los insultos de Pavón a Germán Delfino. “Le dije a Pavón ‘Si me insultas no entrás en el segundo tiempo’. En el entretiempo nunca se le informó a ningún vestuario que estaba expulsado”, aclaró el cuarto árbitro.
Federico Beligoy, el Director de Arbitraje Nacional, se refirió al tema: “Los árbitros no podemos permitir que los técnicos se manifiesten con la vehemencia y la falta de respeto con la que lo hacen. Hay que hacer una bajada contundente con que eso no puede volver a ocurrir”. A
propósito de esta situación, el capo de los referís y actual secretario de la Asociación Argentina de Arbitros (AAA) les remarcará a los jueces que sean más duros con los protagonistas. “A veces los partidos parecen una guerra”, admitió. Y eso no puede pasar en nuestras canchas. ■