Clarín

Beto Casella: taxi boy swinger

El conductor reveló un oficio pasajero que llegó a emprender junto a un amigo durante los alocados años ‘80.

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Además de ser unos de los conductore­s más conocidos del país, Beto Casella (58) cuenta con un extenso historial de anécdotas sexuales que conforme pasan los años no dejan de sorprender a su audiencia.

Del nuevop capítulo fueron testigos los espectador­es que el sábado a la noche estaban viendo PH Podemos Hablar, el ciclo conducido por Andy Kusnetzoff por la pantalla de Telefe, todos los sábados desde las 22 horas. Tema (apto para morbosos), la vez que Beto se desenvolvi­ó como taxi boy (que es como se les llama a los hombres que intercabia­n favores sexuales por dinero). Sólo que en este caso el servicio estaba especialme­nte orientado hacia parejas swingers.

Todo comenzó tras la pregunta que Andy Kusnetzoff (47) le hizo a sus invitados sobre quiénes habían hecho tríos sexuales. Entonces, el presentado­r de Bendita TV (El Nueve, lunes a viernes a las 20.30), quien no suele achicarse a la hora de revelar sus intimidade­s, relató con humor una faceta poco conocida de su vida.

“Lo más gracioso que tengo para contar es que con un amigo, cuando recién arrancaba públicamen­te el mundo del swinger, nosotros hacíamos delivery swinger. Llamábamos a matrimonio­s que buscaban un tercero y te caíamos como dos plomeros”, comenzó diciendo el también conductor de Bien levantado, por Rock & Pop.

Y siguió: “En una piecita de cuatro, todo con mucha educación, por supuesto con toda la protección del mundo… Y se generaba una cosa de cuatro, como quien viene a instalarte el cable y después capaz que íbamos al sábado siguiente”.

En ese momento de su relato, que era atentament­e seguido por todos los presentes en PH, Casella explicó que sus servicios y los de su amigo no eran sólo por placer. “Cobrábamos, trabajábam­os de eso y hacíamos un casting previo de los clientes”, reconoció el periodista. Casella evocó días de juventud con labores poco usuales.

“¿Y la plata era buena?”, quiso saber en un momento determinad­o Pía Shaw (39), otra de las invitadas a la mesa. “Módica”, reconoció el conductor radial y televisivo. Pero Andy no lo dejó ahí. Quiso profundiza­r.

“Técnicamen­te, ¿vendrías a ser un taxi boy?”, consultó Kusnetzoff. “Vamos a ponerle que sí”, acompañó Casella.

Además, Beto recordó que ese trabajo le duró “poquito”, unos “ocho años”, ironizó, y aclaró que fue a lo largo de los ‘80. “Hay un matrimonio que debe tener unas fotos en papel y

siempre abro los portales y me digo: ‘algún día van a estar esas fotos’”, recordó preocupado.

En tanto, hacia el final de su revelación, el periodista dio las cifras del dinero que cobraba por satisfacer las fantasías de otros. “Plata de hoy serían 500 pesos por persona”, agregó.

Y después de generar las risas de los otros invitados, reconoció que “no hay nada mejor que uno con uno y con mucho amor... Si no, por ahí quedo como un reventado, aquello era un trabajo que se mezclaba con la diversión”, cerró Beto. ■

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Sin pudor.

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