Con la soga al cuello en Victoria, con ganas de mejorar en Patricios

Miran otra tabla. Están sentados a la mesa de otra discusión, esa en la que ninguno quisiera estar metido. La de la pelea por mantenerse en la máxima categoría. Ahí andan Tigre y Lanús, el primero más complicado que el segundo. Y ambos se cruzarán, sabiéndose rivales directos, para abrir la décima fecha de la Superliga.

Tigre intentará hacer pie de una buena vez. Sumergido en la zona roja del descenso directo, le cuesta mucho asomar la nariz para tomar algo de aire. Su única motivación es que todavía falta bastante para el final de la temporada y está a tiempo de resurgir. El problema es que su presente no es alentador. Mariano Echeverría tomó el timón del equipo hace dos jornadas y acumula un triunfo y una derrota. A la falta de juego y de resultados, para colmo, se le suman los problemas internos: Carlos Luna ni siquiera fue concentrado por una fuerte discusión tras la caída contra Newell’s, el sábado pasado.

Por su parte, el Lanús de Luis Zubeldía volvió a ganar -ante Patronato- y quiere continuar así para sumar puntos y engrosar su promedio. El DT repetirá los mismos once. “Hay muchas cosas del partido pasado que me gustaron. Debemos evolucionar como equipo y manejar determinadas cuestiones en condición de visitante”, diagnosticó.

En el segundo turno, a las 21 en Parque de los Patricios, Huracán recibirá a Colón. Significará el retorno de Eduardo Domínguez al Ducó y los hinchas del Globo le realizarán un reconocimiento por su paso como DT.

Más allá de la paliza que sufrió ante Independiente, los de Gustavo Alfaro llevan 9 partidos sin perder como locales (4 victorias y 5 empates). A Colón no le va bien fuera de Santa Fe: lleva una igualdad y tres caídas. ■