El dólar perforó el piso de $ 37 y está en su nivel más bajo desde fines de agosto
La situación cambiaria
A un mes de la gestión de Guido Sandleris al frente del Banco Central, la divisa cerró ayer a $ 36,98. En octubre tuvo una baja de casi $ 5 y está cer- ca de la banda inferior de flotación, ahora en $ 35. Esto implica un descenso del 11,8% desde que se aplicó la nueva política monetaria para controlar el tipo de cambio. En tanto, la llegada del primer préstamo del FMI tranquilizó el mercado y llevó las reservas a 54 mil millones de dólares.
En el mes, el dólar minorista, el que compran los ahorristas mayormente a través del home banking, bajó 4,9 pesos, o un 11,8%. El tipo vendedor estaba $ 41,88 a fines de setiembre y ayer cerró a $ 36,98. De la corrida al hundimiento en 30 días. ¿Qué pasó? Algunas explicaciones.
Súper tasa. El 1 de octubre el BCRA estrenó, al mando de Guido Sandleris, su política de súper tasa de interés, que fijó la referencia para el mercado en el 73% a principios de mes. La dejó retroceder solo hasta 68% en la última licitación de Letras de liquidez del mes, realizada esta tarde.
Aspiradora de pesos.. Junto a la sú- per tasa, definió la política de expansión cero de la base monetaria. Bajo esa consigna, en octubre el Banco Central sacó de circulación 119.000 millones de pesos a lo largo de octubre. La aspiradora de pesos, a full.
Todos al peso. Con menos pesos en la calle, y el atractivo de tasas de interés positivas frente a la inflación (mirando desde ahora un año hacia adelante) los inversores se volcaron a los activos en pesos. Los bancos, a las Leliq, el resto del mercado a las Lecap que emite el Tesoro y el chiquitaje al plazo fijo. Todos ganaron en octubre si miden sus inversiones en dólares. Lo que podría llamarse el efecto “carry trade” para todos.
Carry trade para todos. Esto se explica porque la renta obtenida por la tasa de interés en pesos es mucho mayor si se la mide en los dólares que se pueden comprar con esos pesos.
Súper renta en dólares. Un ejercicio. Quien vendió 1.000 dólares a $ 39,88 a fines de septiembre ($ 39.800) y los puso en Lecap al 58% anual en pesos (4,8% mensual) tiene ahora $ 41.710. Con el dólar a $ 36,98, puede comprar 1.127 dólares. Es decir que en un mes ganó 12,7% en dólares. Claro, una apuesta que era muy incierta un mes atrás. Como suele decirse, fácil decirlo con “el diario del llunes”
El dólar seguirá calmo. Los que apuestan al peso estiman que, de volver a devaluarse, el tipo de cambio no lo hará a una tasa tan alta como para que borre completamente la renta obtenida por las colocaciones en pesos. Es decir, seguirá el carry trade, tal vez con una rentabilidad menor.
Riesgos controlados. Naturalmente, una eventual devaluación más o menos brusca y sorpresiva del dólar, echa por tierra estos cálculos. Por lo general, los inversores más profesionales toman coberturas, que reducen notablemente las utilidades, pero también el riesgo de pérdidas.
Colchón del FMI. El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional llevó algo de tranquilidad al mercado, espantando el fantasma del default. El jueves entraron los primeros 5.600 millones de un acuerdo total por 56.000 millones. Son fondos para cubrir los pagos de deuda de 2018 y 2019.
Un piso alto. En dicho acuerdo, el Banco Central se compromete a no bajar la tasa por debajo del 60% anual hasta que, durante dos meses consecutivos, se observe una caída en las expectativas de inflación.
Tasa para rato. Esto no ocurrirá antes de enero, como temprano. Con lo cual las tasas en pesos seguirán positivas por bastante tiempo. ■