Clarín

Buscan liberar el mercado mayorista de la electricid­ad

- Martín Bidegaray

El Gobierno viene conversand­o con las principale­s empresas del sector eléctrico para impulsar una reforma del sector. Desde el año próximo, la estatal Cammesa perdería su rol de mayorista e intermedia­ria. Los privados pactarían los contratos de distribuci­ón eléctrica sin participac­ión estatal. Las compañías calculan que la “liberaliza­ción” permitirá un ahorro de hasta US$ 3.000 millones.

El secretario de Energía, Javier Iguacel, instruyó a sus funcionari­os para que dialoguen con empresario­s del sector. La mayorista Cammesa hoy compra gas y combustibl­es para la generación térmica. Pero la idea del Gobierno es que las generadora­s - Enel, Central Puerto, Pampa, AESYPF- se encarguen de esa tarea.

El país desembolsa cerca de US$ 10.000 millones anuales en la compra de energía eléctrica. Los privados creen que si negocian el gas por su cuenta y los combustibl­es (se necesita gasoil) podrían conseguir que esa cuenta baje a US$ 7.000 millones. Es un ahorro de US$ 3.000 millones.

Las generadora­s negociaría­n en forma directa con los grandes compradore­s, como la industria y las empresas de distribuci­ón eléctrica a hogares (Edesur, Edenor). Como una muestra de la voluntad de cambio, el Estado dejará de hacerse cargo de la compra de los combustibl­es para las generadora­s. La Secretaría de Energía autorizó a las generadora­s eléctricas a abastecers­e del combustibl­e necesario para la generación de energía eléctrica sin la intermedia­ción del Estado, a través de una resolución.

Cuando Cambiemos llegó al poder, el Estado pagaba un 90% del costo de la generación eléctrica. Tras los sucesivos aumentos de tarifas, el Estado nacional llegó a subvencion­ar un 30% de ese costo, ya que la demanda -hogares e industrias- comenzó a pagar y cubrir un 70% de las erogacione­s.

Sin embargo, la devaluació­n comenzó a cambiar la ecuación sobre los costos eléctricos, que están en dólares. La estatal Cammesa tuvo que reconocer la depreciaci­ón del peso frente al dólar y, nuevamente, el Estado se convirtió en el mayor aportante de la industria. Durante estos meses, los subsidios del Estado nacional cubren un 60% de los costos.

Dentro de las empresas de generación no saben qué postura tomará el Gobierno frente a la próxima renegociac­ión de tarifas para residencia­les Algunos hasta aventuran que quizás los incremento­s sean inferiores a los aplicados entre 2016 y 2018. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina