El 5 de diciembre llegarán al continente los restos de un caído en Malvinas
El cuerpo del capitán Luis Castagnari será llevado desde Darwin a Río Cuarto. Es el primer traslado tras la guerra.
“Siento mucha paz porque era una promesa sin cumplir. Un peso muy grande que tenía y las veces que estuve en Malvinas le pedía perdón porque no la podía cumplir”. Con estas palabras, María Cristina Scavarda de Castagnari describió en conversación desde Río Cuarto con Clarín los sentimientos que la atraviesan hoy: finalmente, logró su cometido, ese que lleva gestionando desde hace 36 años.
El próximo 5 de diciembre, los restos de su marido, el capitán post mortem, Luis Darío José Castagnari, fallecido en la guerra de las Malvinas, serán trasladados desde el cementerio de Darwin hasta Río Cuarto, donde vive su familia. Tendrá honores de la guardia militar británica isleña y su féretro podrá ser cubierto allí con una bandera argentina, aunque el proceso se enmarca en acuerdos hu- manitarios. La Fuerza Aérea además le colocará sobre la bandera una gorra, una chaquetilla y un sable.
El hecho es histórico, porque se trata del primer traslado al continente de un caído argentino tras la guerra. Y había sido inicialmente un pedido del propio Castagnari a su mujer, que nunca volvió a formar pareja, el día que partió a la guerra en 1982. Si moría, le pidió, quería que sus cenizas estuvieran junto a las de Gustavo, uno de los cinco hijos de la pareja que falleció con sólo tres años de edad.
El viaje de la familia a Malvinas y el traslado de los restos será financiado por el CEO de Corporación Améri- ca, Eduardo Eurnekian, quien se convirtió en el “padrino” del cementerio de Darwin y de la Comisión de Familiares, porque costeó su restauración en 2004, y entre otros gastos, el viaje de marzo pasado de las familias de los caídos que vienen siendo identificados por el Comité Internacional de la Cruz Roja desde 2017, en un proceso que lleva adelante el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj.
Según explicó a Clarín el gerente de Logística de Aeropuertos Argentina 2000 Roberto Curilovic, María Cristina viajará de Río Cuarto a Córdoba por tierra y de ahí tomará un vuelo de Aerolíneas Argentina que la dejará en Comodoro Rivadavia el 4 de diciembre. Viajará con sus hijos Martín, Guillermo y Walter, y el 5 a la mañana un vuelo privado de American Jet llevará a los cuatro hasta Mount Pleasant con un ingeniero de Aeropuertos. Roxana, la otra hija del matrimonio Castagnari, los esperará en Córdoba para las ceremonias. Es que tras los honores argentinos y la cremación, las cenizas se colocarán en la parroquia Sagrado Corazón, junto a las de Gustavo.
Por lo inquieto, le decían “Furia Castagnari”. Y era el segundo jefe del grupo de Operaciones de la Fuerza Aérea en Malvinas. El entonces primer teniente Castagnari falleció cerca de las 23.20 del 29 de mayo de 1982. Según el testimonio del brigadier mayor Héctor Luis Destri, Castagnari murió en el cañoneo británico naval de aquella noche en una posición cercana al aeropuerto de la capital isleña.
Fue enterrado el 30 por la tarde en el cementerio civil de las islas y cuando el ex capitán del ejército británico Geoffrey Cardozo realizó los enterramientos en Darwin fue trasladado allí. Pero su cuerpo estuvo siempre identificado. Se encuentra en el ala A, fila 1, fosa 14. De ahí será exhumado aproximadamente una semana antes del viaje de María Cristina y sus hijos. Lo hará Tim Miller, dueño de Stanley Growers, quien por decisión de Eurnekian será desde ahora quien se ocupe del cuidado del cementerio.
Cuando Clarín le preguntó a María Cristina qué les diría a quienes se oponen a que más restos de los caídos sean trasladados al continente, afirmó: “Yo respeto la voluntad de cada familia. Las que los quieran traer, las que los quieren dejar, las que quisieron la identificación y las que no. Si él no hubiera dicho nada yo lo dejaba ahí, pero su pedido me martilló el cerebro por 36 años”. La titular de la Comisión de Familiares, María Fernanda Araujo, señaló que el grupo también acompaña lo que decidan las familias. ■
“Yo respeto la voluntad de cada famila”, dice la viuda de Castagnari respecto a los traslados.