Iluminación por satélite y carne “in vitro”, entre los inventos que se vienen
Grandes avances científicos. Cinco tendencias en los laboratorios que muy pronto llegarán a la vida cotidiana.
En el año 2050, según la ONU, habrá unos 9.000 millones de personas en el planeta, lo que sumado a la progresiva adopción de dietas occidentalizadas por parte de China o India, generará una demanda casi insostenible para el medio ambiente. Además, la ganadería industrial produce el 14,5% de los gases de efecto invernadero, más que todo el transporte mundial junto. A continuación, cinco avances científicos que se están desarrollando en los laboratorios, que busca mitigar estos riesgos y que, a corto plazo, podrían modificar la vida cotidiana
Carne in vitro
El gran avance en la industria alimentaria es la producción de carne in vitro o "limpia", que se obtiene en laboratorios extrayendo células madre de animales y se les inyecta una proteína para que crezcan. Se las alimenta con oxígeno, azúcar y minerales que en pocas semanas se convierten en fibra muscular, con el mismo sabor de los cortes tradicionales.
La elaboración de carne artificial podría generar entre un 78% y un 96% menos de emisiones de gases de efecto invernadero, según un estudio de la Universidad de Oxford.
Iluminación por satélite
La ciudad de Chengdu, ubicada al sudoeste de China, planea lanzar un satélite de iluminación capaz de producir un brillo ocho veces superior al de la Luna, para complementar el alumbrado público. Este concepto es desarrollado por el Instituto de Investigación en Sistemas Microelectrónicos de Ciencia y Tecnología Aeroespacial (CASC).
El secreto de su luminosidad es que el satélite estará a una distancia de unos 500 kilómetros de la Tierra - la Luna está a 384.400 km- y será capaz de cubrir un diámetro de entre 10 y 80 kilómetros con su rango de luz, cuya intensidad podrá ser regulada.
"El primer lanzamiento será básicamente experimental, pero los otros tres tendrán un gran potencial en el terreno civil y comercial", afirmó Wu Chunfeng, director de la Sociedad de Ciencia del Área de Tian Fu New, la organización responsable del proyecto. Según sus cálculos, esta fuente alternativa de iluminación supondría un ahorro en energía para esta ciudad de unos 170 millones de dólares.
Mascota robótica
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se espera que la población mayor de 60 años se duplicará para 2050 y se triplicará para 2100. En plan asistencial y de compañía, la idea de una mascota robótica que no requiere cuidados ni paseos es una solución para los ancianos que viven solos. Un grupo de investigadores está entrenando redes neuronales para interpretar y predecir el comportamiento de los canes. La intención es alcanzar un modelo de inteligencia visual que sea capaz de tomar las mismas decisiones que estos animales.
Sin ir más lejos, en diciembre se pondrá a la venta en los Estados Unidos el perro robot Aibo. Este cachorro mecánica desarrolla su personalidad en base a las interacciones con las personas, lo que le da a cada ejemplar un carácter único en función de sus compañeros humanos. ¿Un ascensor al espacio? Ingenieros aeroespaciales consideran que el futuro de la exploración espacial no está en la construcción de cohetes cada vez más grandes y potentes sino en trazar un elevador que se capaz de subir hasta la Estación Espacial Internacional ( EEI). Un equipo de la National University Corporation Shizuoka en Japón, están detrás de un proyecto que tiene como fin, trasladar personas y suministros a complejos en órbita sin emplear un vehículo.
Robots cada vez más inteligentes Investigadores del Foro Económico Mundial publicaron un informe sobre las perspectivas de empleo. En concreto, estimaron el volumen de producción que se confiará a robots y otros métodos automatizados. Al momento, el 29% de la producción mundial está automatizada y se espera que en los próximos cuatro años esta cifra alcance el 42% del trabajo. Y si bien desaparecen muchos puestos, muchos otros serán creados.
Uno de los referentes de esta nueva generación de máquinas es Sophia Hanson, el primer androide con inteligencia artificial avanzada del planeta, capaz de sostener conversaciones, demostrar a través de su rostro gestos similares a los humanos e incrementar su conocimiento cada vez que interactúa con una persona. ■