Para los fans, el padre de los superhéroes no murió
Creador de superhéroes emblemáticos del cómic como Spider-Man y Hulk, revolucionó el género. Hacía cameos en las películas de sus personajes de Marvel.
El legendario guionista, escritor y productor Stan Lee falleció a los 95 años. El creador y cocreador de Black Panther, Spider-Man, X-Men, Thor, Iron Man, Los Cuatro Fantásticos, El Increíble Hulk, Daredevil, Ant-Man y tantos otros personajes, murió ayer por la mañana en el Cedars-Sinai Medical Center de Los Angeles.
Lee era considerado uno de los hombres más influyentes de la cultura pop mundial, el genio creativo detrás de los superhéroes que marcaron la vida de muchos niños y adolescentes de todo el mundo. Para otros, también fue un hombre que se adjudicó la gloria de otros colegas bri- llantes como Jack Kirby, Steve Ditko, Don Heck o Gene Colan, quienes colaboraron con él en los inicios de la llamada era dorada del cómic, desde fines de los años ‘30 hasta el ‘50.
Lo que nadie puede negar es que sus icónicos personajes sigue siendo populares tanto en los libros de cómics como en el cine y en la televisión. Según el sitio de cifras de taquilla The-Numbers, las películas de superhéroes adaptados de los cómics de Lee han recaudado más de US$ 24.000 millones en todo el mundo.
“Mi padre amó a todos sus fans. Fue el hombre más decente y grande”, le dijo a TMZ Joan Celia Lee, hija del dibujante.
Había nacido como Stanley Lieber, hijo de migrantes rumanos judíos, el 28 de diciembre de 1922 en Manhattan. En 1939, con sólo 17 años, consiguió trabajo como asistente en la Timely Comics, una división de una revista sensacionalista que prometía poco. Eventualmente, esa editorial se convertiría en Marvel Comics, que nació con el objetivo de competirle a DC Comics y su exitosa Liga de la Justicia, integrada por Batman, Superman y otros.
Su talento como escritor y editor de historietas -también fue productor y realizaba cameos menores en películas que funcionaban como guiños a sus fans- fue clave para que Marvel se convirtiera, primero en la editorial número uno de cómics en el mundo, y luego en un gigante multimedios adquirida por Disney.
Antes de eso, en 1972, Lee fue nombrado director editorial de Marvel. Era la cara visible y marketinera de la empresa, asistente habitual a convenciones de cómics y una estrella venerada por la comunidad comiquera.
Los últimos años de Lee no estuvieron exentos de polémicas. Luego de la muerte de su mujer Joan, en julio de 2017, demandó por fraude a los ejecutivos de POW! Entertainment, una productora que él mismo había fundado en 2001 para desarrollar con- tenidos en cine, televisión y video juegos, por mil millones de dólares. Sin embargo, unas semanas más tarde decidió levantar la demanda. En abril de este año se supo que también tenía conflictos legales con su hija Joan Celia por no manejar bien sus finanzas. Según The Hollywood Reporter, Lee estaba convencido de que tanto su hija como algunos socios comerciales y gente de su círculo íntimo se estaban aprovechando de su vejez y del deterioro de su salud men mental y cardíaco posterior al fallecimient fallecimiento de su esposa. Junto a su mujer habían hab creado un fondo económ económico para su hija. Se estima est que Stan L Lee tenía una fortuna cercana a los 50 millon millones de dólares. Casado con Joan Boocock durante 70 años -tuvieron otra hija en 1953 que murió a los tres días de nacer-, siempre se rumoreó que fue ella la inspiración del guionista para crear a Mary Jane, la modelo pelirroja novia de Peter Parker (Spider-Man). Además, cuentan que Joan era quien incentivaba a Lee a darle más cualidades humanas a sus superhéroes.
“Me solía dar vergüenza que yo era un simple escritor de libros de cómics mientras otros construían puentes o decidían estudiar medicina. Pero entonces me empecé a dar cuenta: el entretenimiento es una de las cosas más importantes en la vida de las personas. Sin entretenimiento, quizá se irían a pique. Siento que si sos capaz de entretener a la gente, estás haciendo algo bueno”, le dijo al diario Chicago Tribune en abril de 2014.
Su muerte, como se esperaba, provocó un sinfín de mensajes de despedida, anécdotas y recuerdos de infancia de millones de fans en las redes sociales. A ellos se sumaron grandes actores como Robert Downey Jr., el Iron Man de la pantalla grande: “Te debo todo a vos. Descansa en paz, Stan”, escribió en Twitter. Otro que se mostró agradecido fue Ryan Reynolds, actor que compone a Deadpool.
Gene Simmons, guitarrista de Kiss, conocido fan del dibujante, escribió: “A Stan Lee. Gracias por hacer de mi infancia algo mucho más emocionante con tus increíbles superhéroes. Gracias por inspirarme a pensar y soñar en grande. Gracias por Hulk, Thor, los Cuatro Fantásticos y tantos otros. Serás tristemente extrañado. Descansa en paz”, escribió quien fue incluido por Lee en una de sus historietas a modo de homenaje.
Bob Iger, el CEO de Walt Disney (la compañía compró Marvel Entertainment por US$ 4 mil millones en 2009), emitió un sentido comunicado para despedir al legendario creativo. “Stan Lee fue tan extraordinario como los personajes que creó. Tenía el poder de inspirar, entretener y conectar. La escala de su imaginación era sólo superada por el tamaño de su corazón”. ■
Lee, nacido en Manhattan, participó en los inicios de la llamada era dorada del cómic.