Liberan a los jóvenes que quisieron entrar a la quinta del Presidente
Aunque las imágenes de las cámaras de seguridad de la quinta de Los Abrojos desnudaron, una vez más, la fragilidad de la seguridad presidencial, en el Gobierno aseguran que la respuesta que dio la custodia de Mauricio Macri cuando cuatro jóvenes intentaron entrar haciéndose pasar por familiares del jefe Estado fue “exitosa” y sostienen que no se incrementarán las medidas para evitar este tipo de situaciones.
Los ocupantes del Volkswagen Gol negro que el domingo llegaron hasta el portón de la propiedad del Presidente quedaron en libertad, confir- maron a Clarín fuentes de la investigación.
La causa quedó en manos del juez federal Juan Manuel Culotta y en su declaración los jóvenes aseguraron que se trató de una “broma” que se les ocurrió al regreso de una fiesta. Fueron liberados temprano este lunes de la Delegación San Martín de la Policía Federal.
Si bien en el Gobierno están lejos de justificar el incidente y se niegan a tolerar la “broma”, sostienen que las medidas de seguridad dispuestas funcionaron “correctamente” y que se trató de un hecho “menor”.
El expediente fue caratulado como violación de domicilio y amenazas. La Justicia secuestró sus teléfonos celulares y allanó su casas sin encontrar vínculos con organizaciones políticas.
“No va a haber ningún cambio. Intentaron entrar, los frenaron y les pidieron identificarse. No pasó a mayores ni entraron a la Quinta como se dijo: hicieron marcha atrás y se fueron gritando”, fue la reflexión cerca del secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, quien tiene bajo su órbita a la Casa Militar, que está a cargo de la custodia de Macri.
En rigor, a los jóvenes -de entre 21 y 22 años- se los detuvo recién después de una persecución en la que no pusieron demasiada resistencia. Al cabo, como señalaron fuentes de la investigación, se trata de chicos “de clase alta y universidades privadas” que no tenían como objetivo atacar al Presidente. “Cuando los intentaron identificar, hicieron marcha atrás y se fueron gritando, fue una pavada de cuatro pibes”, describieron el episodio que protagonizaron Federica López Brown, Juana Avalos, Federica Albisu y Mateo Passerieu, cuatro chicos que se conocieron en el Club Universitario de Buenos Aires (CUBA).
Con todo, pese a la cercanía del G20 y a los ataques de sectores anarquistas que se produjeron la semana pasada, en el Gobierno creen que no es necesaria ninguna medida adicional. “El sistema funcionó. Se frenó el coche y luego se los detuvo”, fue el balance que hicieron también desde el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich.
No se trata de una frase de ocasión. Meses atrás, la ministra se desmarcó y no dudó en advertir sobre la seguridad presidencial, cuando elevó un extenso documento a De Andreis pidiendo que Macri no viajara más en aviones comerciales, ya que a su criterio constituía un “alto riesgo”. ■