Sturzenegger, de las críticas por lo que pasó al optimismo por lo que viene
El ex jefe del Central reveló una muy tensa relación con la Rosada. Cree que ahora bajará fuerte la inflación.
Después de un prolongado voto de silencio desde que renunció a la presidencia del Banco Central el último junio, Federico Sturzenegger reapareció ayer en una íntima ceremonia en la que la Academia de Ciencias de Buenos Aires lo designó académico de número. En las miradas de los asistentes a la sede de la avenida Alvear había casi una invitación a que abandonara un discurso con el tono que exige la ocasión. No los defraudó y lo dejó para el final. Así contó que se fue tras una “desgastante puja con el Ejecutivo que duró seis meses”.
Y siguió: ”Ante la imposibilidad de convencer al Central, el Ejecutivo decidió avanzar de manera unilateral. Lo que ocurrió después es historia conocida. Ante el debilitamiento de la política monetaria, el tipo de cambio se disparó y se derrumbó el precio de los activos en pesos. Para fin de enero, el spread de la deuda argentina respecto del de países emergentes se había cuadruplicado y en el primer mes luego del cambio de metas, las expectativas de inflación se deterioraron más de lo que lo habían hecho en el conjunto de los 15 meses anteriores. ¿Qué fue lo que ocurrió? La credibilidad del Banco Central había sido afectada, con lo que la crisis internacional encontró al país con una institucionalidad monetaria debilitada”. Sturzenegger recordó unas pa- labras del vicepresidente del Banco Central de India, Viral Acharya: “Los gobiernos que no respetan la independencia del Banco Central, tarde o temprano van a sentir la ira de los mercados financieros, incendiarán su economía, y llegarán a lamentar el día que debilitaron una institución regulatoria tan importante”
Hace dos meses Sturzenegger confesó en una charla privada de Harvard que durante su gestión le decían desde la Casa Rosada que la política monetaria era muy dura. “Y yo era el único que decía que era un problema cambiar las metas de inflación porque podía desanclar el proceso de desinflación. Sos el único que piensa eso, me reprochaban”, soltó al enumerar sus contra argumentos. “La inflación había caído 15 puntos, la economía volaba y el crédito había tenido el mayor crecimiento en 20 años. ¿Por qué tocar nada?”, recriminó.
Pero ayer al final se mostró optimista. En su visión, “la sociedad argentina ha procesado el golpe que representó el corte en su financiamiento con una madurez muy alentadora. Y la buena noticia es que nadie se en- roló en teorías mesiánicas pensando en la Convertibilidad o la dolarización, que son vistas como sugerencias casi folclóricas”.
Hasta se animó a pronosticar: “En un contexto de creciente credibilidad, la inflación podría literalmente derrumbarse en el primer trimestre de 2019”. Y finalizó citando su película favorita: “Hay un momento genial de la primera de las películas de la Guerra de las Galaxias en la que Obi Wan Kenobi le dice al joven Luke Skywalker: ‘Tus ojos pueden engañarte, no confíes en ellos’”. ■