“En lugar de ser un hecho de alegría, jubilarse es todo lo contrario”
A lo largo de la vida, con suerte en muchos casos, nos sucede una cantidad de hechos que al final serán el mejor de los recuerdos que nos llevaremos a la otra... si es que la hay. Pero hay un hecho que considero que es, desde hace años, el peor. Cuando nos toca nos bajonea, nos enferma, nos “mata”: la jubilación. En lugar de resultar un hecho de alegría, de poder disfrutar de los hijos, de los nietos, de paseos o de lo que quisiéramos, empezamos a recibir haberes miserables. En muchos casos, no nos corresponden y hay que empezar a hacer juicio, a esperar las sentencias que demoran, a enfrentar las apelaciones. Y todas las vueltas que da la Justicia.
En algún momento, luego de varios años, si aún se está vivo, se reciben los haberes que corresponden. Aunque en algunos casos, en el mismo momento de cobrar, salta que nos liquidaron mal y... comienza un nuevo juicio. Además, como práctica habitual, luego de años de trámites llega la sentencia, se liquida a los 120 días hábiles y a partir de ahí, se toman meses, pagando una multa por incumplimiento. Hablo por todos los que trabajamos en blanco y aportamos como corresponde 30 años o más (los gobiernos no insisten en reducir el trabajo en negro). Aclaro que el monto de los juicios que reciben los jubilados, además de los honorarios, paga Ganancias. Hay que sumar a nuestros pesares la aprobación de una ley que nos quitó el ajuste semestral y se inició el trimestral. Aprovecho para “agradecerles” a funcionarios, políticos, gremialistas por su preocupación, reclamos y protestas que hicieron y hacen por los jubilados y sus haberes. mando por lo suyo.
Esta carta pretende despertar la consciencia ya no en los políticos sino en lo poco de humanidad que pueda quedar dentro de ellos. • ¿Cuándo será el tiempo de nosotros? Me refiero a las casi 300.000 personas que cobramos una jubilación o pensión por renta vitalicia, ex AFJP. Quedé viuda con dos hijos y cobró hace 14 años una renta de ahora $ 1.000. ¿Por qué nadie se hace cargo de nosotros, por qué no pasamos a la ANSeS? Percibimos sobras, sin aumentos, sin bonos de fin de año... Quisiera saber quién puede vivir con esa miseria. Ningún gobierno se hace cargo de la estafa que se cometió. • El Estado (ANSeS) hace caso omiso al mandato de la Corte Suprema. Hay miles de casos de juicios por ajuste en las jubilaciones con sentencia definitiva enviados a la ANSeS para que se haga efectivo el pago.
A ver si queda claro: el juez le dice a la ANSeS que deberá cumplir con la sentencia y el Estado no cumple. ¿Cuál es el rol del Estado? Cumplir con las leyes y dar el ejemplo. O sea, el primer incumplidor es el Estado. • “El corazón tiene razones que la razón desconoce” (Blaise Pascal). Tal vez ello me envalentone para dirigirme de modo directo pero respetuoso a la jefa del FMI, Christine Lagarde. ¿Qué razón me impulsa a tomar esta decisión de escribirle a una de las personas más poderosas del mundo a sabiendas que es poco probable ser escuchado o mejor dicho, leído? Es ver y escuchar la tristeza y desilusión de muchos que como yo pintan canas y mes a mes reciben su jubilación sólo suficiente para calmar los calambres que el hambre provoca en su estómago y el resto gastarlo en remedios para menguar los dolores físicos de su cuerpo desgastado por años de trabajo. No sólo eso: les duele saber que el Gobierno, reconociendo que el salario actual es insuficiente, decretó un bono de fin de año pero para los jubilados no entienden por qué fueron excluidos.
Le consulto Madame Directora, ¿puede usted disponer un monto extraordinario a sumar al préstamo original que permita otorgar a los jubilados un bono de fin de año?
Me gusta soñar, pero no con cosas imposibles. ¿Difíciles de concretar? Puede ser, pero no por ello pierdo las esperanzas y la fe en los demás.