“Que Cristina vuelva a ser presidenta depende más de Macri que de ella”
En Chile Piñera tiene un gobierno de derecha, pero es un gobierno. Esto es incomprensible, no hay rumbo ni modelo”
En el peronismo tenemos que tener una relación, que muchos reniegan, con la Iglesia católica y la evangelista”
Hasta último momento Usted dudó en acompañar el Presupuesto pero finalmente los senadores de Tierra del Fuego votaron a favor...
-Siempre planteé que iba a defender a rajatabla los intereses de los fueguinos. Después de un trabajo importante, el Gobierno derogó un decreto que pedíamos y dictó otro para que la industria petroquímica vuelva a tener beneficios impositivos, lo que nos va a permitir recuperar puestos de trabajo. También hubo modificaciones que nos dan una perspectiva muy interesante con la industria electrónica. Se modificaron aranceles y corrigieron un tema de intimaciones con la AFIP para que ahora las empresas puedan compensar sus saldos a favor con otros impuestos internos. ¿Esto anula su pedido por el Fondo Sojero?
-Judicializamos ese reclamo y lo seguiremos en la Corte. De hecho, el Gobierno nos depositó fondos que devolvimos, pese a la necesidad de recursos que tenemos, porque desde un principio instamos a la acción judicial. Los gobernadores que acompañaron el Presupuesto fueron tildados de "traidores"
-Estoy hastiada de esa grieta, de que por un lado somos golpistas y por el otro traidores. No somos ni una cosa ni la otra, queremos ser institucionalistas, responsables, pero también necesitamos ser escuchados por el Presidente. A raíz de los acuerdos con Nación yo voy a poder poner a mi provincia en la misma posición que Vaca Muerta, es la realidad: tenemos ese mismo potencial en cuanto a puestos de trabajo, investigación e incluso la posibilidad sustituir importaciones, porque Argentina hoy importa propileno, metanol, urea. Cuando uno de los principales problemas que tengo en la provincia es la falta de trabajo y los despidos ¿cómo no voy a defender a mi gente? En varias oportunidades criticó la “falta de sensibilidad” del Gobierno
-Y lo sigo haciendo. Hay que tener un modelo de país ¿Cuál es el de Mauricio Macri? Podría gustarme o no, pero hoy no veo que haya uno. Están permanentemente tapando urgencias. Las tasas actuales son imposibles para el desarrollo de cualquier industria. No me gusta que el FMI tenga oficinas en el Banco Central, que se alquilen una en otro lado. ¡Basta de perder independencia!
¿La sorprendió la gestión de Cambiemos?
-Sí, claro. En Chile, Sebastián Piñera tiene un gobierno de derecha pero es un gobierno. Esto es algo incomprensible: no hay un rumbo, no hay modelo. ¿Destaca algo positivo?
-La política con Vaca Muerta, que había comenzado con Miguel Galuccio y esta gestión la continuó y profundizó.
¿El peronismo tiene chances de ganar en 2019?
-¡Sí! El peronismo gana en 2019, dame que te firmo (risas).
Sin embargo, hoy están divididos
-Hoy no hay una jefatura y eso es una dificultad para organizarnos. De todas maneras queda tiempo para el proceso electoral y tengo expectativas de que podamos tener ese líder que nos ordene.
¿Quién le gustaría que sea?
-Muchos tienen posibilidades. Juan Manuel Urtubey (Salta) es interesante, Sergio Uñac (San Juan) también, Juan Schiaretti (Córdoba)... Hay muchos y quizás surjan otros.
¿Y Sergio Massa?
-Lo estoy conociendo, pero es alguien más que puede tener una posibilidad.
Esta semana usted se sumó a la foto ampliada del grupo de Massa, Urtubey, Schiaretti y Miguel Angel Pichetto ¿adhiere a Alternativa Federal?
-Aspiro a que podamos trabajar por un frente amplio que incluya a todos. Los peronistas
tenemos vocación de poder, no lo vamos a negar y siempre hemos sido frentistas. Debemos recuperar peso en territorios clave, como Córdoba y Santa Fe para ser competitivos.
Sin embargo Alternativa Federal pone límites. Urtubey dijo que una interna con Cristina Kirchner sería "estafar a la gente"
-Creo que tenemos un mecanismo electoral que son las PASO y pueden utilizarse perfectamente para dirimir candidaturas. Es una herramienta válida y si no la tomamos lo primero que haría Macri sería tratar de derogarla. No hay una única visión, hay múltiples visiones y vamos a tener que dirimirlas.
¿Le parece entonces una PASO con Cristina Kirchner incluida?
-A mí no me molestaría para nada. En 2003 la posición del partido fue competir con tres listas, fue la manera de resolver una situación y creo que puede llegar a pasar que se de ese debate. Siempre existe una posibilidad incluso hasta la segunda vuelta para ver cuál es el límite de cada uno. Yo no soy anti nada.
¿El acuerdo en el Consejo de la Magistratura fue un avance en la unidad?
-Sí, fue un paso en la idea de consensuar y de hablarnos más entre todos, que yo creo que es algo totalmente necesario.
¿Le gustaría que Cristina sea candidata ?
-Es una decisión muy personal de ella. Yo creo que también hay muchos otros, como los que mencioné, que tiene intereses. Pero si Cristina quiere construir una opción tiene todo el derecho y tal vez una oportunidad. Pero al no haber una manifestación de su parte es difícil saber qué quiere hacer.
¿Y cree que si se presenta puede volver a ser Presidenta?
-Va a depender de cómo el Gobierno sepa gestionar este momento de crisis: si hay una reacción hacia sus propios electores o los siguen descuidando. Hoy creo que la posibilidad de que Cristina vuelva a ser presidenta depende más de Macri que de la propia Cristina. Si la situación sigue siendo tan mala, ¿qué va a hacer la gente? No se va a quedar en lo malo. Si Macri no se dedica a Gobernar la posibilidad la va a tener cualquiera. Por eso, no veo tan obvia su reelección como quiere plantear el Gobierno.
Más allá de la figura que pueda surgir ¿qué autocrítica hace del peronismo?
-Tenemos que reincorporar la sensibilidad y, creo, tener una relación que muchos reniegan con la Iglesia católica y la evangelista. Es importante para nosotros recuperar espacios y territorios. No hemos sabido interpretar el reclamo del campo, del sector industrial... ¿No cree que al PJ le falta una agenda sobre corrupción?
-Falta una agenda de transparencia, sí, como le falta a todos los partidos populares de América Latina. Es un debate y una autocrítica que hay que hacer de frente a la sociedad. Pero en esta época no si es determinante, quizás lo fue en el pasado pero hoy lo que preocupa es cómo se vive el día a día. Creo que habrá un fuerte componente económico.
¿Piensa que Macri va a tener que sacrificar su reelección y poner a otra persona?
-Ellos creen que en 2015 les fue tan bien por los consejos de Marcos Peña y Durán Barba, pero yo creo que les fue bien porque nosotros tuvimos una pésima estrategia electoral. ¿Cuál fue la mala estrategia en 2015?
-No apoyar lo suficiente al candidato Daniel Scioli, no ayudarlo en la Provincia y tener un candidato a vice (Carlos Zannini) que era odiado en el lugar donde él nació y nos hizo perder un distrito clave como Córdoba.
El año pasado en Tierra del Fuego usted enfrentó al kirchnerismo ¿Este año?
-Estamos trabajando por la unidad del peronismo y lo estamos logrando. Me gustaría en- cabezar un frente electoral bien amplio donde estén todos, incluso algunos que no son peronistas.
En su provincia nunca un gobierno peronista logró reelegir
-Sí, hay un estigma. Desde que somos provincia nunca pudo renovar un mandatario del PJ. Tengo ese desafío y también construir una alternativa, generar nuevos liderazgos. Fue la primera mujer en recibir una gobernación de otra mujer...
-Tierra del Fuego es una provincia con una impronta femenina fuerte en la política. Muchas mujeres participan. La presidenta de la convención constituyente que redactó nuestra constitución fue una mujer: Elena de Mingorance, del Movimiento Popular Fueguino, pero fue poco valorada.
¿La política es machista?
-Lamentablemente sí. Si bien Argentina tuvo grandes evoluciones, aún nos falta. La situación de pobreza que sufren las mujeres argentinas con sus niños, que es algo que a mí me cala hondo, sería diferente si hubiera más dirigentes mujeres.
¿En que situaciones lo sintió ?
-Sería injusto decir que yo sufrí el machismo porque siempre me han dado posibilidades y he sido respetada. Pero lo veo en general, hay una falta de oportunidades que se refleja en todo. En lo que cuesta llegar a ciertas posiciones. Por ejemplo, si bien en el Senado hay alta participación femenina, siempre las conversaciones son más con los hombres. Tam- bién se ve en la clase empresarial.
¿Cree que la paridad va a abrir camino?
-A mi me encanta que se haya aprobado la paridad, era una necesidad. Va a traer sus discusiones pero va a ser muy bueno.
En la campaña 2019 volverá el tema del aborto. Usted estuvo en contra.
-Personalmente estuve en contra pero me gusta que mis equipos puedan tener libertad porque son cuestiones de consciencia. Soy profundamente creyente, la fe me es muy importante y pocos políticos hablan de esto. Rezo todos los días el Evangelio, no tengo problema en decirlo.
¿Iglesia y Estado no deben ser asuntos separados ?
-Muchos ven ese tema como gravísimo, yo creo que el vínculo es una necesidad. No sólo con las iglesias católicas sino también con las evangelistas porque sostienen a un montón de ciudadanos que el Estado no contiene. Usted se manifestó en contra de la políticas del Gobierno sobre Malvinas ¿Qué opina de las palabras del canciller Jorge Faurie, que se refirió al “pueblo" de las islas?
-El canciller o tiene mala fe directamente, o confunde todo, porque no es “un pueblo” lo que hay en Malvinas, es una población implantada. Me preocupa que podamos perder apoyo latinoamericano. Me molesta que se deje atrás el reclamo de soberanía, me duele como gobernadora legítima de las Islas y como argentina. Hubo soldados que dejaron su vida ahí. ■