Buenos Aires recibe al mundo cara en pesos, pero barata en dólares
Para los extranjeros, alojarse y salir a comer o a divertirse cuesta mucho menos que a comienzos de este año.
Con una inflación que ya acumula 38,2% en lo que va del año (hasta octubre) y sueldos en pesos que no acompañaron semejante salto, vivir en Buenos Aires se volvió más costoso para los porteños. Pero, para las delegaciones extranjeras que invadirán la Ciudad por la cumbre del G-20, la percepción será la opuesta: para ellos, que llegan con dólares y euros en los bolsillos, hacía mucho que Buenos Aires no estaba tan "barata".
Por la fuerte devaluación que sufrió este año la moneda argentina, alojarse, salir a comer y divertirse en la Ciudad será para los visitantes extranjeros mucho menos costoso de lo que hubiera sido para ellos en los últimos años, e incluso si hubieran llegado a la Argentina durante el primer trimestre de este año.
Si en enero cada dólar que traían les rendía $ 19, en la actualidad obtienen $ 39,90: es decir, el doble, un 110% más. Si para comprar $ 5.000 a principios de año necesitaban 263 dólares, hoy les basta con 125. Para los que llegan de Europa, si antes con cada euro podían comprar $ 23,50, ahora les dan $ 46,50: un 98% más.
Claro que los precios en pesos actuales tampoco son los mismos que los de enero, pero el costo de vida en moneda local no fue tan grande como el de la cotización del dólar y el euro, en especial en los rubros claves para los turistas. Según el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad (IPCBA), medido por la Dirección de Estadística y Censos porteña, entre enero y octubre los precios en pesos subieron sólo 12,8% en hoteles, 31,4% en restaurantes y comidas preparadas, 36,8% los de paquetes turísticos y excursiones, y 26,4% los de servicios recreativos y culturales.
Así, según el Ranking de Costo de Vida de la consultora Mercer, Buenos Aires cayó este año del puesto 40 al 76 en la lista de las ciudades más caras para los turistas extranjeros, quedando por detrás de San Pablo (58), Santiago (69) y Montevideo (75).
El país también descendió en el ranking que elabora la revista The Economist según el costo de comprar en cada país un combo Big Mac de McDonald's. En la última edición, el costo en dólares del producto -ajustado según el producto bruto per cápita- se derrumbó a US$ 2,71, contra US$ 4,13 que salía un año atrás y los US$ 5,51 que vale en Estados Unidos.
Todo esto deriva en que para estadounidenses, franceses, alemanes, rusos o mexicanos, entre otros, mu- chos precios de Buenos Aires pueden ahora resultarles más baratos que los de sus propias ciudades.
Los valores del alojamiento sirven de ejemplo. En Buenos Aires, reservando con tiempo, un extranjero puede alojarse en el centro por alrededor de US$ 50 la noche en un 3 estrellas, US$ 75 para un 4* y desde US$ 130 con 5*, en base doble. En comparación, para dormir en Nueva York se necesitan US$ 75 a US$ 140 por noche en un 3*, entre US$ 160 y US$ 350 en un 4* y desde US$ 500 para tener a una suite en un 5*. En el centro de Berlín, el presupuesto ronda los US$ 80 dólares la noche en 3*, US$ 110 en 4* y arranca en US$ 150 en 5*. En México, en tanto, hacen falta unos US$ 58 por noche para dormir en un 3* y US$ 280 para ir a uno de 5*.
En Buenos Aires, segúnun relevamiento oficial, los restaurantes cobraban en octubre una media de $ 362 (US$ 9) por su plato más vendido, $ 256 (US$ 6,40) por una milanesa de ternera con guarnición, $ 407 (US$ 10,20) por un bife de chorizo con guarnición y $ 238 por un plato de ravioles (US$ 6). Un combo de comida rápida oscila entre $ 240 y $ 300, con una media de $ 270 ( US$ 7).
En su tiempo libre, los extranjeros que lleguen a Buenos Aires para el G20 podrán, por ejemplo, pagar $ 800 (poco más de US$ 20) para ver una obra de primera línea en un teatro de la avenida Corrientes. También podrán ir al cine por $ 300 (US$ 7,80), mientras que la misma actividad puede costar US$ 11 en Francia, US$ 13 en Canadá, más de US$ 9 en Gran Bretaña y Alemania, y US$ 16 en Nueva York. ■