Ahora Cristóbal López responsabiliza a su socio
Después de buscar desligar a sus hijos en una causa por lavado de dinero y así evitar que terminen procesados, Cristóbal López pidió ampliar su indagatoria en la causa Agosto SA (empresa de Osvaldo Sanfelice, socio de los Kirchner), y ante el juez Julián Ercolini buscó justificar las operaciones pero responsabilizando de todo a su socio Fabián De Sousa.
La Justicia sospecha que parte de los 8.000 millones de pesos que Cristóbal López no pagó al fisco-correspondientes a la retención del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) que Oil Combustibles hacía a sus clientes- se derivaron a Agosto SA, empresa de Sanfelice, amigo, empleado y socio del dueño de Indalo. El negocio no fue azaroso: “Es un intermediario en el manejo de la relación comercial con los Kirchner”, consignó el fiscal Gerardo Pollicita cuando los imputó.
La Unidad de Información Financiera (UIF) y PROCELAC entregaron a la justicia documentación que revela que tres sociedades del Grupo Indalo (Alcalis de la Patagonia, Oil M&S y CPC SA) “habrían derivado fondos, previamente defraudados al Estado Nacional, a la firma” de Sanfelice por 39 millones de pesos.
La Justicia sostiene que hubo una “clara maniobra de lavado de activos”, que comenzaba con las “ganancias ilícitas obtenidas por el Grupo Indalo”. Después, se desarrolló “un mecanismo para el reciclaje de una porción de esas ganancias ilícitas”: el dinero primero circulaba en el grupo Indalo como “préstamos” y después se contrataba a Agosto SA.
Así, los fondos podrían “llegar a manos de una persona que integraba el entorno de los ex presidentes con la apariencia de haber sido obtenidas en forma lícita, es decir, como parte del sistema económico legal”. Los únicos clientes de Agosto SA (dedicada al alquiler de maquinaria) fueron las tres firmas de Indalo. ■