“Tenemos un récord de personas detenidas en casos de corrupción”

Ministro de Justicia.

¿Qué balance hace de los tres años de Justicia 2020?

Son siete ejes, pero dos principales. Se trata de contribuir en esta decisión del Gobierno de combatir el narcotráfico, la corrupción y la criminalidad organizada y en definitiva mejorar el sistema de justicia penal. El objetivo a mediano plazo es tener el nuevo Código Penal, que esperamos que sea enviado en marzo al congreso, y la implementación del nuevo código procesal penal federal.

Pero también hubo otras leyes...

Claro, la ley de flagrancia y la ley de juicios unipersonales, la ley del arrepentido, la ley de medidas de prueba especiales, la ley de la víctima. Todas permitieron ir reconfigurando el sistema penal, donde la víctima esté protegida y que la respuesta sea más rápida y se acabe con la puerta giratoria. Que los casos terminen no por procesamientos sino con juicios orales. Cuando llegamos a la gestión había más de un 99% de impunidad. De cada cien delitos que se cometían menos de una persona estaba cumpliendo una sanción efectiva. Y hoy tene- mos un record de personas detenidas en el sistema federal, especialmente vinculadas a narcotráfico y corrupción. Hay más condenados que procesados detenidos.

¿Y cuál es el otro eje?

Lo no penal, donde también se hicieron avances veloces, por ejemplo todo lo que es la oralidad. Hoy más del 30% de los jueces civiles de Argentina, de todo el país, en el nivel federal y en el nivel local están usando estas técnicas de oralidad. Esto permite reducir procesos que en promedio duraban más de seis años a alrededor de un año.

¿Quedó algo pendiente?

Sí. La reforma de la Justicia federal, que está en el Senado, con la creación de más cargos de jueces en todo el país. Hoy la cantidad de jueces federales en la Capital Federal es razonable por la carga de trabajo y además teniendo en cuenta que todo lo que tiene que ver con narcomenudeo y tenencia de drogas pasa a partir del 1 de enero a la Ciudad. Los jueces federales se van a quedar sin un 70% de las causas que hoy le ingresan a cada juzgado. Pero sí se necesitan más jueces federales en el norte.

¿Por qué se suspendió dos veces el envío del proyecto de reforma del Código Penal al Congreso?

Es la primera vez que en cien años se va a enviar esto y obviamente es un tema muy complejo. Además en ese momento la sociedad venía cruzada por la discusión del aborto y obviamente el Código trata ese tema, lo mismo que la tenencia de drogas para consumo personal sin trascendencia a terceros, que son temas que generan discusiones, incluso hacia adentro del Gobierno, y estamos tratando de construir el mayor consen- so posible para que se aprobado.

Se habla de una “mayoría peronista” en la Corte. ¿Ud lo ve así?

Es importante que la Corte sea independiente de cualquier sector político o ideología. Me parece que es malo que esté esa creencia en la sociedad y esperemos que no sea así sino que sean jueces fallando de acuerdo a sus criterios en cada uno de los casos. Comodoro Py tiene muchos juicios por casos de megacorrupción y casi la misma infraestuctura que hace 25 años. ¿Hay proyectos para mejorar eso?

Hay dos. Este traspaso de causas de drogas a la ciudad de Buenos Aires le saca el 70% de la carga de trabajo. El otro tema central es una ley que se aprobó en el Congreso que permite el traspaso de los tribunales orales criminales a los tribunales orales federales. El Consejo de la Magistratura ya aprobó el traspaso del TOC4 a federal. Vamos a enviar en los próximos días los pliegos de esos jueces al Senado. Y esperamos que el Consejo de la Magistratura apruebe los otros cuatro tribunales. ■