El Parlamento británico decide si respalda el acuerdo de May
El próximo martes la Cámara de los Comunes debe decidir si da su apoyo al acuerdo del “Brexit” propuesto por la primera ministra, Theresa May. El panorama es sumamente crítico, según señalan los expertos, dado que la mandataria no contaría con la cantidad suficiente de votos para respaldar la iniciativa. Esto sumiría al país en una nueva crisis política.
El Partido Conservador cuenta con 316 diputados en la Cámara de los Comunes, de los cuales casi un centenar han adelantado que votarán en contra del pacto consensuado con Bruselas, al igual que la mayor parte de la oposición y los socios de gobierno de May, los diez parlamentarios del norirlandés Partido Democrático Unionista (DUP). Estos dijeron, además, que romperán su acuerdo de gobierno si May no renegocia el pacto y persiste en presentarlo al Parlamento en su forma actual.
La primera ministra se encuentra en una compleja situación. Necesita que al menos 320 diputados, de los 639 que votan, den luz verde al Acuerdo de Salida y a la Declaración Política que establece la futura relación bilateral entre Londres y Bruselas.
Por ese motivo, los expertos convienen en que lo más probable es que pierda esa votación por un gran número de votos en contra, en cuyo caso, las posibilidades de cómo se desarrollarán entonces los acontecimientos giran en torno a la permanencia de May como primera ministra.
O bien se enfrenta a una moción de censura en Westminster, o a una moción de confianza dentro de su propio partido, sostiene Simon Usherwood, profesor de Política de la Universidad de Surrey. Ambos escenarios contempla la opción de un segundo referéndum.
Amber Rudd, secretaria de Trabajo y Pensiones, fue la primera del oficialismo en hablar de un “Plan B” si la primera ministra pierde la votación clave del martes en la Cámara de los Comunes. “Todo podría pasar”, incluyendo un segundo referendo, si el gobierno no obtiene el visto bueno de los legisladores, señaló Rudd, que respalda el pacto de divorcio alcanzado por May. La dirigente prevé además un periodo caótico.
Aunque ninguna de las alternativas es mejor que el actual acuerdo, Rudd dijo que preferiría un modelo similar al de Noruega, que no forma parte del bloque pero sí del Espacio Económico Europeo, es decir, forma parte del mercado común. “Parece factible no solo debido a las condiciones nacionales sino tomando en cuenta las posiciones que han asumido los parlamentarios”, afirmó Rudd. ■