Nuevo revés judicial para el empresario que mató al hermano de Feinmann
Un tribunal le rechazó el pedido de prisión domiciliaria a Gastón Berganza, condenado a 24 años de cárcel.
Gastón Berganza, el millonario condenado por asesinar a balazos al medio hermano del periodista Eduardo Feinmann, sufrió un nuevo revés judicial. Cuando parecía que estaba a un paso de salir de prisión, la Justicia volvió a cerrarle la puerta.
El Tribunal Oral en lo Criminal N° 5 de San Isidro fue el que, en su momento, lo condenó. Le ordenó luego la detención. Le rechazó un pedido de excarcelación. Le negó el beneficio de la detención domiciliaria. Y ahora resolvió “no hacer lugar a ninguna medida de morigeración de la prisión preventiva que viene requerida en favor de Gastón Berganza”, que cumple la pena de 24 años de cárcel por matar a Feinmann.
Los fundamentos de la decisión de los jueces del TOC N°5, Ariel Introzzi Truglia, Marcela López Ramos y Ariel Rolón, a los que accedió Clarín, son coherentes con la postura que tienen desde aquel 16 de marzo en el que resolvieron declarar culpable a Berganza (38) por asesinar a Diego Feinmann (33), en el marco de un caso atravesado por un problema de polleras y que mezcla sexo, lujo y obsesión.
Los jueces además condenaron al millonario por intentar matar al taxista que llevó a la víctima hasta Pilar, aquel 20 de noviembre de 2015 que ocurrió el homicidio, y ordenaron su arresto inmediato. Unos diez días después se conocía el fallo a 24 años de prisión. Desde entonces, Berganza duerme en el pabellón N°11 de la Unidad N°9 de La Plata.
El nuevo rechazo del TOC N°5 se resolvió a pedido de la Sala III de la Cámara de Apelaciones de San Isidro, que había revocado el fallo del tribu- nal que le negaba la prisión domiciliaria monitoreada que había solicitado Berganza para irse a vivir a un departamento de Puerto Madero, y había pedido que vuelva a analizar la solicitud del condenado.
Lo curioso de esa resolución de la Sala III, firmada por Carlos Fabián Blanco y Gustavo Adrián Herbel, fue que el juez Herbel le habían dado la derecha al TOC N°5 cuando rechazó la excarcelación de Berganza y cambió de opinión cuando se trató la prisión domiciliaria. Los argumentos del tribunal que condenó a Berganza siempre fueron los mismos. Y en esta nueva resolución se mantienen.
“Nada ha variado... de modo de permitirme cambiar la opinión”, expreso la jueza López Ramos, seguida por sus pares Introzzi Truglia y Rolón. Y siguió: “Entiendo que no están dadas las condiciones... para poder aplicar una medida menos gravosa respecto de Gastón Berganza, suficiente para neutralizar los peligros procesales de frustración del proceso y de fuga”.
n el fallo que mandó preso a Berganza los jueces del TOC N°5 habían dicho: “Se ponderan un rosario de circunstancias (...): peligros procesales dignos de valoración; gravedad de los delitos por los que fuera condenado y el escaso tiempo en detención respecto de la pena efectivamente impuesta, que no lo hacen merecedor de soltura de ningún tipo”.
Ahora, y luego de que el tribunal citara a las partes para escucharlas, además de sostener su postura también le negó a la defensa la posibilidad de una presentar caución.
Al momento en que ocurrió el crimen, Berganza hacía tiempo que estaba en pareja con María Laura Alayón, un mujer que había tenido una relación con Diego Feinmann, pero que no había terminado de la mejor manera, incluso, él la hostigaba y ella le había puesto una restricción.
Aquel 20 de noviembre de 2015, luego de una escalada de acoso hacia el empresario y a su novia, Feinmann fue en un taxi junto a un amigo hasta el restorán donde estaban cenando la pareja, junto a la hija de la mujer y la madre del empresario.
Tras algunos insultos, Berganza disparó desde el interior de su auto BMW tres tiros mortales a Feinmann con una pistola Glock para la que no tenía permiso de portación. Otros dos balazos fueron hacia el taxi, donde estaba el chofer que se salvó de milagro.
Para la fiscal del caso, María Inés Domínguez, Berganza “no buscó la situación pero se le presentó la oportunidad y mató a Feinmann porque tenía odio contra esa persona”. ■