La novedad de la “clase obrera integrada”: con trabajo formal pero pobres

Fuera de los planes sociales. Se detectó un crecimiento de asalariados que viven por debajo de la línea de pobreza.

Por la caída del salario real, la pobreza pegó un salto de 7,2 puntos entre los trabajadores formales. Así, del total de pobres, el 43,3% pertenece a la “clase trabajadora integrada”, el nivel más alto de toda la década, según la definición del Observatorio de la UCA. Entre los informales, la pobreza golpea al 61,6%. De esto se desprende que tener trabajo, ya no informal sino incluso formal, no evita que el trabajador y su familia vivan por debajo de la línea de pobreza. El 43,4% equivale a 4,5 millones de asalariados y empleados formales pobres.

“Esta tendencia negativa se observa con niveles diferenciados para todos los grupos sociales destacándose la amplia incidencia registrada en el estrato de trabajadores marginales, pero también en los hogares de clase obrera integrada. Esta situación afectó en mayor medida a los hogares del conurbano bonaerense, donde la tendencia al deterioro de los hogares de clase obrera resultó más marcada”, dice el Informe de la UCA.

El salto de este año se explica por la fuerte caída del poder adquisitivo de los salarios tanto del sector publico como del privado. “Durante 2018, la inestabilidad macro-financiera, sumada a los efectos de la sequía sobre el agro, consolidaron una crisis externa que terminó con una fuerte depreciación del peso, una aceleración de la tasa de inflación y una caída del salario real. Esto implicó una caída del consumo interno y la en- trada a un nuevo ciclo estanflacionario, con un fuerte ingreso a la pobreza de los sectores medios bajos”, dijo el Director del Observatorio, Agustín Salvia.

Los datos de la Secretaria de Trabajo marcan que el salario formal a octubre, en promedio, aumentó el 28,3% interanual mientras la inflación fue del 45,9%. Es una caída de 17,6 puntos. Este descenso o abaratamiento del costo salarial no generó un mayor empleo. Los datos oficlales marcan una pérdida de empleos formales, en especial en la industria manu- facturera con 107.900 asalariados menos que tres años atrás.

Salvia dice que “en tanto se mantenga el actual escenario recesivo, sólo cabe esperar un aumento del desempleo, de los trabajos de subsistencia y la precariedad laboral, agrandando las desigualdades estructurales que afectan al mercado de trabajo, con efectos directos sobre la pobreza”. Se estima que la próxima medición del INDEC marcará una tasa de desempleo de más del 10%.

No hay cesantías masivas pero no aumenta el nivel de empleo, prosiguió Salvia, al aumentar la pobreza entre la “clase obrera integrada”, en proporción menos pobres reciben ayudas sociales porque los “integrados” no califican para recibir ese tipo de ayuda, aunque vivan bajo la línea de pobreza.

“En 2018 hubo un descenso de los hogares y la población en situación de pobreza que accede a transferencias monetarias provenientes de programas sociales. Esta tendencia se explica por el empobrecimiento de sectores pertenecientes a los estratos medios que no acceden a transferencias por parte del Estado. En 2017 el 43% de los hogares pobres de estrato medio no profesional estaba cubierto por políticas asistenciales. Este porcentaje descendió al 23% en 2018”, precisó Salvia.

Otro dato del Informe es que aumentó la percepción de pobreza en la población. “Más gente se siente pobre”, sostiene el Director del Observatorio. “Desde 2010 hay un empeoramiento sostenido de la autopercepción en materia de insuficiencia de ingresos en los hogares. En 2018 cerca de la mitad de los hogares declararon que sus ingresos no fueron suficientes para cubrir sus gastos”. Esta percepción es muy fuerte entre los asalariados formales pero ascendió entre la “clase obrera integrada”.

También por la caída del salario real hubo achique forzoso de la dieta alimentaria --inseguridad alimentaria total--que también, con el 24,9%-son los más altos de la década. “En el contexto de crisis de 2018 no solo se deterioró la situación entre la clase obrera marginal “sino que también alcanza a estratos bajos con mayores niveles de integración.. ■

Cayó de 43% a 28% la cantidad de hogares cubierta por políticas asistenciales.