Clarín

Entre Huracán y Vélez no se sacaron ventajas en 90 minutos muy intensos

El conjunto de Heinze se puso en ventaja en el primer tiempo. Al comienzo de la etapa final igualó Gamba.

- Waldemar Iglesias wiglesias@clarin.com

Fue empate, al cabo. Y tuvo ese desenlace de protestas compartida­s. Antes sucedió un partido de intensidad­es, de variantes, de encantos, de tropiezos. Empataron 1-1. Pero la sensación más allá del resultado fue otra: Huracán y Vélez, con sus particular­idades en términos del juego, son dos equipos competitiv­os.

Era un desafìo desde lo táctico. El Vélez de Heinze, el equipo con mayor posesión en la Superliga, visitaba a un Huracán que cambió de paradigma: de la bravura ordenada de los días de Alfaro a las osadías de Mohamed. En ese contexto se ofreció el primer tiempo. Quiso más el local en el comienzo, con presión cerca del área ajena. Intentó con recursos diversos (desde el pelotazo a Lucas Barrios hasta alguna aparición de los laterales y el juego por abajo, sin grandes expectativ­as de tiki tiki), pero no pu- do trasladar al resultado esa sensación de supremacía. Le faltó contundenc­ia ante Lucas Hoyos. Esa virtud que tanto resuelve.

Vélez, habituado a jugar en terreno rival, se vio presionado en su espacio. No se inhibió. Al contrario, esperó su momento sin traumas. Y cuando resplandec­ió ese crack en marcha que se llama Matías Vargas golpeó fuerte. Las dificultad­es las deshizo ese jugador con futuro de Europa. Apa- reció por la izquierda, gambeteó a su curioso modo y manera, desequilib­ró, tiró un centro atrás y le permitió convertir a Brian Cufré. Los pibes de Vélez: el tal Matías tiene 21 años, aunque parezca - por actitud, por personalid­ad- un tipo de una carrera entera; Brian tiene 22 y es un soldado de un equipo de soldados.

El gol no se trató de una consecuenc­ia de méritos. Sino de precisión. Huracán tuvo más chances, pero se mostró incapaz en esos metros finales. Correspond­e aclarar: Andrés Roa, lesionado, es una ausencia que late, insoslayab­le al momento de las explicacio­nes.

Pero había más en el territorio de las áreas y de las precisione­s. Vélez pecó en la propia (con la torpeza de la infracción a Garro) y Gamba acertó en el penal. Parecía una continuida­d del primer tiempo. Una reedición del inicio. Un capítulo más del duelo táctico en un partido en el cual durante varios tramos mereció aplausos.

El 1-1 restó brillos y puso la lucha en el campo. Como dice Mohamed no se trata de un clásico. Pero ese final de meter y meter mucho tuvo de tal. Quizá por eso, le faltaron situacione­s de gol y le sobraron de lucha. A una década, de aquel 2009 de definición polémica y/o bochornosa, se siguen mirando con recelo. La última escena de tumultos puede dar fe. ■

 ?? TELAM ?? Acá gana el defensor. Chimino anticipa a Vargas, la figura de la noche, y corta el avance de Vélez.
TELAM Acá gana el defensor. Chimino anticipa a Vargas, la figura de la noche, y corta el avance de Vélez.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina