El arquero del Sub 15 es una de las diez víctimas del incendio
Se intenta establecer cómo pasó. Además de los 10 muertos hubo al menos tres heridos de gravedad.
No sale de su estupor Brasil tras la tragedia que envolvió al Flamengo, en cuyas instalaciones, en Río de Janeiro, se desató un incendio que acabó con la vida de diez personas e hirió de gravedad al menos a otras tres. Ayer se supo que Cristian Esmério, arquero de la selección Sub 15 y una las grandes promesas que tenía la entidad en sus inferiores, fue la primera víctima fatal identificada.
La noticia del incendio en el predio Ninho do Urubu sacudió al fútbol brasileño en la madrugada del viernes, un día después del fuerte temporal de lluvia y viento que había afectado a Río y también había terminado en tragedia, con al menos seis muertos.
Si bien todavía se investigan las causas del incendio, las primeras investigaciones afirman que se originó en una de las habitaciones del complejo en el que se concentran las divisiones juveniles del poderoso club carioca.
El primer cuerpo en ser reconocido fue el de Esmério, quien también había citado a la Sub 17.
“Es la mayor tragedia” en la historia del club, afirmó el presidente de Flamengo, Rodolfo Landim. Y agregó: “Estamos todos consternados. Es la mayor tragedia en 123 años”. Las otras víctimas fatales son Arthur Vinicius (14 años), Athila Paixão (14), Bernardo Pisetta (15), Jorge Eduardo Santos (15), Pablo Henrique (14), Samuel Thomas Rosa (15), Vitor Isaías (14), Gedson Santos (14) y Rykelmo de Souza Vianna (16 años).
El predio Ninho do Urubu -el Centro de entrenamiento presidente George Helal- fue construido en 2014 y es utilizado por la Primera de Flamengo y por sus categorías menores. Y en los Juegos Olímpicos de 2016 fue la casa de la Selección Argentina de fútbol.
“El Flamengo está de luto”, tuiteó el club sobre una imagen de fondo negro, en medio de expresiones de solidaridad del mundo el deporte. Y el jugador del Real Madrid Vinicius Junior, que se formó en las inferiores del Flamengo, también lamentó lo ocurrido: “íQué noticia triste! Oremos por todos. Fuerza, fuerza, fuerza. íSe me eriza la piel al recordar todas las noches que pasé allí. Todavía no creo”, añadió el jugador de 18 años.
Se sumó Zico, máxima gloria del club: pidió que se investigue “hasta las últimas consecuencias”. ■