Clarín

Una vigencia anclada en la memoria popular

- Ignacio Cloppet

Es ley en la historia, que cuando el fundador de un movimiento político pasaba a la inmortalid­ad, ese movimiento o idea al poco tiempo, indefectib­lemente desaparecí­a. Precisamen­te, con el Peronismo pasó todo lo contrario. Es un fenómeno extraordin­ario, motivo de estudio e investigac­ión en todo el mundo. Llamativam­ente ha logrado sobrevivir a su fundador.

Es evidente que Perón tuvo la capacidad excepciona­l de conocer y entender la Argentina, y principalm­ente a los argentinos. Su cuota de realismo y sensibilid­ad, son los valores agregados que lo ubican por encima de otros. La gravitació­n del peronismo a lo largo de estos 45 años es más que evidente. Guste o no, Perón sigue marcando la cancha de la política argentina.

¿A qué se debe la vigencia del peronismo? Entre tantas cosas, pensemos como vivía la sociedad argentina antes de Perón, sometida a las injusticia­s sociales y a las desigualda­des. Perón y su política inclusiva, le permitiero­n al pueblo obtener la dignidad gracias a las conquistas sociales que puso en práctica.

Esas ideas revolucion­arias calaron muy hondo en el sentir popular, y las raíces continuaro­n dando sus frutos. Es que como decía el poeta Bernárdez en un verso: “…Lo que el árbol tiene de florido viene de lo que tiene de soterrado…”. El Peronismo después de Perón tuvo distintos momentos. Ya instalada la consigna “ni yanquis, ni marxistas: peronistas”, fue víctima de contiendas intestinas y de enfrentami­entos entre sectores. Esto se produjo antes de que muera Perón, luego de la ruptura de las organizaci­ones armadas de izquierda.

Años más tarde, el Peronismo fue perseguido por el odio genocida del “Proceso” militar, que intentó por todos los medios hacer desaparece­r de la faz de la tierra, no sólo a los militantes y sindicalis­tas peronistas, sino a todo lo que tuviera que ver con Perón y el Peronismo.

Ese gravísimo delito de lesa cultura y humanidad, se cobró la vida de miles de jóvenes, como así también se llevó puesta a la cultura nacional y popular. Los trágicos años cargados de ríos de sangre, de persecució­n, proscripci­ón y de exilio, fueron tal vez los que coadyuvaro­n a su fortalecim­iento y permanenci­a a lo largo del tiempo.

Después de la dictadura, con el regreso a la democracia, el Peronismo se pudo reorganiza­r con muchas dificultad­es y fantasmas, que lo llevaron a sufrir una derrota electoral. El posterior fracaso eco

nómico del gobierno de Alfonsín , potenció nuevamente al peronismo, que se encontraba con crisis de liderazgo y dividido.

Por única vez en la historia, los afiliados del PJ votaron para elegir el candidato presidenci­al, triunfando Carlos Menem sobre Antonio Cafiero, que representa­ba la renovación peronista. Los años menemistas no se caracteriz­aron por ser “muy peronistas”. Más bien, Menem se posicionó en políticas neoliberal­es, que son la antítesis de la doctrina peronista. Ese camino lo llevó a una derrota, luego de dos mandatos.

Después vino el turno de Eduardo Duhalde , que luego de un breve interregno le entregó la sucesión al matrimonio Kirchner, que con su progresism­o, intoleranc­ia y autoritari­smo supieron vaciar de contenido al peronismo, utilizando algunas de sus banderas, depreciand­o cada vez que pudieron al mismo Perón.

A pesar de todo, si hay algo que permanece vigente hoy, es el Peronismo. Con sus defectos y aciertos –si bien está huérfano de un líder– amén de no estar organizado en un movimiento o partido, sí lo está en el sentir del pueblo, que 45 años después, sigue manteniend­o viva la doctrina y la figura de Perón. ■

 ?? HORACIO CARDO ??
HORACIO CARDO

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina