Clarín

Procesaron a un puntero K en la causa de la efedrina

Se trata de Jorge Lazota, militante de Almirante Brown, conocido de Rudy Ulloa y asesor de un diputado nacional.

- Daniel Santoro dsantoro@clarin.com

La jueza federal María Servini procesó ayer con prisión preventiva al puntero K Jorge Lazota, entre otros once sospechoso­s, y detuvo al empresario farmacéuti­co y ex comisario Silvio Salerno en la causa por el tráfico de efedrina durante el gobierno de los Kirchner.

Lazota “es hermano de un ex jefe de comisarios de abordo del avión presidenci­al Tango 01 de la época de Néstor y Cristina Kirchner”. Además, está muy vinculado a los hermanos Zacarías, que trabajaron en la Casa Rosada en la época de Néstor y en el PAMI.

Como puntero Lazota había actuado en el kirchneris­mo de la localidad bonaerense de Almirante Brown y era conocido de Rudy Ulloa. Ahora había regresado a la política como "asistente" del ex viceminist­ro de Desarrollo Social y diputado nacional Daniel Arroyo.

De los 12 procesados, 8 continuará­n detenidos, y con un embargo de 180 millones de pesos a cada uno, confirmaro­n fuentes judiciales a Clarín. Salerno es el dueño de la droguería Profarma en la que trabajaba Damián Ferrón, una de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez de 2008. Las otras dos víctimas de ese crimen fueron Leopoldo Bina y Sebastián Forza. Este último había aportado 200 mil dólares a la campaña presidenci­al de Cristina KirchnerJu­lio Cobos del 2007.

Luego del juez federal Ariel Lijo descubrió que otros empresario­s farmaceúti­cos también habían hecho donaciones irregulare­s a la campaña presidenci­al K de 2007. En el 2016, Lijo procesó sin prisión preventiva al ex superinten­dente de Servicios de Salud y responsabl­e del financiami­ento de la campaña K, Héctor Capaccioli, a cuatro personas ligadas a la llamada “mafia de los medicament­os” y a otro responsabl­e de recibir aportes financiero­s por presunto lavado de dinero a través de aportes a esa postulació­n.

Entre el 2003 y el 2008 importaron irregularm­ente 50 toneladas de efedrina desde China y la India para ser triangulad­as a México donde se producían metanfetam­inas con destino al mercado de los Estados Unidos.

Salerno fue detenido en su casa de la localidad de El Palomar donde tenía un arma calibre 9 milímetros que le fue secuestrad­a por miembros de la División Anticrimen de la Policía de la Ciudad.

Este caso, que está investigad­o en varias causas, tiene procesados al financista Ibar Pérez Corradi, extraditad­o de Paraguay en el 2006, al “Rey de la Efedrina”, Roberto Segovia, a dos de los hermanos Zacarías y a dos ex funcionari­os de la Secretaría de Lucha contra el Narcotráfi­co de la época kirchneris­ta.

Además de la detención, la jueza Servini dispuso los procesamie­ntos con prisión preventiva de Daniel Escosteguy, Cristian Heredia, Carlos San Luis, el ex policía Ricardo Sladkowski, Claudia Flores, Carlos Di Vita y el ciudadano mexicano Rodrigo Pozas Iturbe, acusado de traficar efedrina a México. En tanto, la magistrada procesó sin prisión preventiva a Pedro Escosteguy, Cristina Hereduia, Elizabeth Caballero y Romina Paravia. Los procesados forman parte de la última ola de detencione­s ocurrida en junio pasado en el marco del expediente por el hallazgo de dos “narcobaule­ras” en el barrio porteño de Belgrano. El hallazgo se produjo de modo fortuito cuando los responsabl­es de la firma “Depósito Belgrano SRL”, quienes explotan bauleras donde se escondían 1,5 toneladas de efedrina. ■

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