La guerra de las marcas llegó hasta la camiseta
Si desembarca en la Boca, el gigante alemán tendrá a los dos más grandes del fútbol argentino.
La piel de Boca está en tiempo de definiciones. Porque en diciembre vencerá su vínculo con la marca de indumentaria que lo viste desde 1996 y el lunes terminará el plazo establecido para recibir las ofertas de las firmas interesadas. Sobre la mesa el club tiene una que está cerca de aceptar. Y así compartiría la misma marca de ropa con la Selección argentina y con River.
Desde marzo Boca escuchó las propuestas de las firmas que buscan quedarse con una de las camisetas más cotizadas del planeta fútbol. Pero, después de desechar a Puma y New Balance (no están al alcance de la producción a nivel local), llegó la propuesta del gigante alemán: Adidas.
Nada menos que 10 millones de dólares por temporada, diez años de vínculo, regalías por ventas en Argentina y el exterior, vestimenta para el fútbol profesional masculino y femenino (además de las inferiores) y un convenio más que favorable en el posicionamiento internacional. Todo eso ofreció la firma de las tres tiras para quedarse con Boca y monopolizar un mercado local como en épocas pasadas.
Nike, la empresa estadounidense, tiene apenas 48 horas más para igualar la propuesta aunque solicitó más tiempo para hacer el análisis de la oferta a desarrollar. Y por una cláusula que figura en el contrato con Boca, en el caso de equiparar la mejor propuesta recibida el club deberá aceptar continuar con la firma que lo viste desde los tiempos de Antonio Alegre y Carlos Heller y que se consolidó con los acuerdos posteriores con Mauricio Macri, el sucesor de Alegre.
Hace un año estuvo todo dado para sellar el acuerdo con Nike por otras diez temporadas. Pero en el momento de la firma se modificaron algunos puntos convenidos y entonces Boca decidió licitar su indumentaria. Por eso se acercaron desde distintas marcas para llevar adelante un desarrollo que se considera único para la región. Desde Under Armour -con un gran crecimiento en el rubro deportivo en el último tiempo- pasando por Kelme, que con capitales chinos también avisó que estaba interesada. Todos quisieron teñirse de azul y oro. Hoy la puja parece estar entre los dos gigantes de la indumentaria.
“La propuesta de Adidas es muy importante pero dejaron una puerta abierta para que Nike la pueda igualar. Si hubiesen sido más agresivos en la oferta no habría dudas a esta altura”, le contaron a Clarín desde Boca. En el club creen que hasta último momento no se podrá descartar que la marca de la pipa lo ofrecido por su competidora. Se sabe: Boca es su club insignia en Sudamérica y perderlo sería, además, dejar todo en manos de su gran rival en el campo de la indumentaria deportiva.
Fernando Colombo, director de Marketing de Adidas Argentina, quien el miércoles había estado en la presentación de la nueva camiseta de River, evitó dar precisiones al respecto. “No puedo comentar sobre esto en este momento. Se viene hablando desde hace tiempo, hay muchos rumores y hay que ser cautos”, marcó al pasar.
Los movimientos de ajedrez en este tipo de operaciones son pensados y la estrategia no se modifica.
El 29 en Boca habrá una asamblea de Representantes y la orden del día habla del tratamiento que hizo la CD relacionado a las marcas de indumentaria. Se expondrán los detalles de las propuestas recibidas y - de acuerdo a su aprobación- luego se comunicará la decisión a Nike para que ejecute o no su cláusula contractual para igualarla. Si no lo hace en 30 días Boca cambiará de vestimenta después de 23 años.
En Núñez están atentos a los movimientos de Boca y Adidas. ¿Por qué? Según trascendió el acuerdo entre River y la marca que ya lleva 37 años (uno de los más extensos de la empresa) incluye una cláusula que le asegura ser el equipo mejor pago del país. Con Estudiantes y Newell’s ello se respetó en el último tiempo porque se trata de contratos mucho más bajos, pero las cifras que recibió Boca en la oferta tienen un ingreso superior. ¿Habrá un conflicto si eso avanza? Se verá. ■
Soy delantero de área, pero si me ponen en las puntas trato de adaptarme. Yo juego en el lugar que me pide el profesor. Siempre aprendo”.
Nunca tuve dudas. Yo había dado mi palabra de venir a jugar a Boca. Además, no vamos a comparar Genoa con Boca. Ojalá pueda ganar muchas cosas”.