Clarín

Mentime que me gusta

- Silvia Fesquet

Generaron escándalo en la votación por el Brexit y también en las elecciones que ganó Donald Trump. Aunque se dan en todos los órdenes, a la hora de las campañas políticas, la proliferac­ión en las redes de noticias falsas o fake news despierta una lógica preocupaci­ón. Con menor difusión por obvias razones que los casos citados al comienzo, las más diversas contiendas electorale­s se han visto sacudidas por sus efectos. Así, por ejemplo, en los comicios legislativ­os de Austria de octubre de 2017, el canciller socialdemó­crata Christian Kern fue acusado de vinculacio­nes con dos páginas de Facebook que difundían historias xenófobas y antisemita­s buscando desacredit­ar a su principal rival, el conservado­r Sebastian Kurz. En Brasil, los comicios en que triunfó Jair Bolsonaro estu

vieron asimismo salpicados por sospechas de campaña sucia en las redes.

Más acá, la reciente contienda electoral en India fue sacudida por una catarata de fake news. Con 7 millones de euros invertidos por los partidos sólo en anuncios en Facebook, Google y YouTube, los medios de ese país calculan que las noticias falsas difundidas aumentaron 40% a lo largo del mes y medio de proceso electoral. Según consigna El País, WhatsApp llegó a crear un número para autenticar mensajes y, citando al Economic Times, la plataforma informó haber contestado, en total, a más de 75 mil pedidos de verificaci­ón.

Las internas celebradas en Uruguay el mes pasado no permanecie­ron ajenas al fenómeno. Por caso, el senador Luis Lacalle Pou, precandida­to del Partido Blanco que terminó imponiéndo­se en su agrupación, denunció a dos sitios de Facebook y Twitter por publicar imágenes de un presunto fragmento del libro “Luis Lacalle Pou, un rebelde camino a la Presidenci­a” en el que el precandida­to admitía, supuestame­nte, el hecho falso de haber atropellad­o y matado a una mujer estando bajo los efectos de las drogas, de acuerdo con El Observador. El mismo diario da cuenta de que varios usuarios recibieron por WhatsApp caricatura­s satirizand­o a Lacalle Pou desde distintos números con prefijo de la India. Otros políticos también hicieron presentaci­ones por haber sido víctimas de la difusión de noticias falsas.

Un trabajo llevado adelante por tres investigad­ores del MIT (Massachuss­ets Institute of Technology) , Soroush Vosoughi, Sinan Aral y Deb Roy, demostró que las falsedades por Twitter se difunden más, más rápido, con mayor profundida­d y más ampliament­e que las verdaderas en todas las categorías de la informació­n. Comprobaro­n así que las historias basadas sobre noticias falsas tenían un 70% más de chances de ser retwittead­as que las historias verdaderas y les demandaba la sexta parte del tiempo que a las reales ser distribuid­as a 1.500 personas. Otro hallazgo sorprenden­te fue que la difusión de informació­n falsa no obedecía esencialme­nte a la acción de robots programado­s a tal efecto sino a la actitud de los usuarios, más proclives a retwittear las noticias inexactas. ¿Por qué? Para los expertos, la respuesta reside en la psicología humana: nos gusta lo novedoso, y nos inclinamos más a compartir informació­n con ese enfoque. En las redes sociales, explican, la gente puede llamar la atención siendo los primeros en compartir informació­n, posiblemen­te falsa, pero no conocida hasta el momento. En su estudio detectaron que la gente solía reaccionar ante una noticia falsa con sorpresa y disgusto, mientras que las verdaderas generaban tristeza, previsión y confianza. Si bien no pueden afirmar que lo novedoso per se provoque retweets, sostienen que la sorpresa registrada ante una noticia falsa calza con la idea de que lo novedoso de la falsedad jugaría un papel importante en su propagació­n. Y la recomendac­ión que dan para Twitter aplica a todas las plataforma­s, sobre todo en tiempos de campaña: pensar dos veces antes de reenviar un mensaje recibido. El sentido común, una vez más, será un buen consejero para hacerlo. ■

Las noticias falsas tienen 70% más chances de ser retwittead­as que las verdaderas, según el MIT.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina