Evo Morales lidera los sondeos en el inicio de la campaña electoral
Nueve partidos políticos de Bolivia arrancaron ayer una reñida campaña electoral en la que el presidente Evo Morales aspira a un cuarto mandato en los comicios presidenciales y legislativos del 20 de octubre.
Según un sondeo de la encuestadora Ciesmori, el mandatario que compite por el Movimiento al Socialismo obtendría el 37% de los votos frente al 26% para su principal contendiente, el ex presidente Carlos Mesa (Comunidad Ciudadana), aunque no le alcanzaría para ganar en primera vuelta. Más abajo se encuentra el senador de Santa Cruz, principal bastión opositor, Óscar Ortiz, del frente de centro derecha “Bolivia dice NO”.
La encuesta muestra un aparente estancamiento de la oposición, que asiste dividida a los comicios y ha tenido dificultades para arrancar. Se trata de la mayor ventaja en encuestas que favorecen al mandatario, en el poder desde 2006, pero lo ubican por debajo de las votaciones históricas que obtuvo en tres comicios anteriores.
El estudio muestra que Morales perdería en Santa Cruz, la más poblada y motor económico del país, pero ganaría en La Paz y Cochabamba, las otras dos ciudades más grandes. Un 21% de los encuestados en toda Bolivia, donde el voto es obligatorio, está aún indeciso.
La norma electoral en Bolivia da como vencedor en primera vuelta a quien supere el 50% de votos o el 40% con diez puntos de ventaja sobre el resto. El sondeo refleja que en un balotaje Morales alcanzaría el 40% y Mesa el 38, lo que supone un empate técnico, dado el margen de error de la consulta.
Con más de trece años en el poder, Morales preside el gobierno más largo de la historia de Bolivia. Durante su mandato, el país experimentó crecimiento, estabilidad económica y política aunque la economía está mostrando fisuras por un creciente déficit fiscal y hay denuncias de la oposición contra una deriva autoritaria del presidente. En el último tiempo, el gobierno de Morales afronta escándalos de corrupción y denuncias de encubrimiento de la justicia.
Morales perdió un referendo en 2016 para habilitarse a una tercera reelección y apeló al Tribunal Constitucional, que avaló el derecho a la reelección indefinida por encima del veredicto popular. Su candidatura es considerada ilegal por la oposición al incumplir el límite constitucional de dos mandatos consecutivos y el resultado de esa consulta. Morales, el mandatario con más tiempo en el poder en la historia de Bolivia, aspira a un cuarto mandato hasta 2025, cuando se conmemora el bicentenario de la independencia del país. ■