Un acuerdo evitará que cierren los neuropsiquiátricos porteños
La ley de Salud Mental, sancionada en 2010 y reglamentada en 2013, establecía el 1° de enero de 2020 como la fecha límite que el Estado se fijó para terminar con los neuropsiquiátricos porteños. En otras palabras, exigía que de acá a 5 meses el sistema de atención de la salud mental debía estar reconvertido. Y que los llamados hospitales "monovalentes" o "de especialidad" -enfocados exclusivamente en la atención psiquiátrica- pasaran a ser parte de una "red de servicios con base en la comunidad". Pero todo cambió.
A punto de vencerse el plazo, sin las redes intermedias creadas, un acuerdo entre la Asociación de Médicos Municipales (AMM) y el Ministerio de Salud de la Ciudad garantiza que centros como el Hospital Borda y el Moyano seguirán en pie normalmente.
El acta firmada hace casi una semana por el presidente de la AMM, Jorge Gilardi, y la ministra de Salud de la Ciudad, Ana María Bou Pérez, establece "refuncionalizar" los hospitales neuropsiquiátricos en lugar de cerrarlos. Como confirmó el titular de la Dirección Nacional de Salud Mental, Luciano Grasso, aún quedan 42 de estos centros de especialidad psiquiátrica en Argentina.
"Nos vamos a adecuar a la ley, pero sin ese límite para que se cierren los hospitales. Los hospitales 'monovalentes' pasarán a tener el resto de las especialidad, como cardiología, gastroenterología y demás, con acento en la psiquiatría. También tendrán una guardia común", detalla a Clarín Aldo Caridi, subsecretario de Atención Hospitalaria de la Ciudad.
Un mes atrás, en una entrevista con Clarín Grasso había dicho que a casi una década de la sanción de la ley nacional de salud mental 26.657, "no es que no se hizo nada". Pero se hizo poco. "Hay distancia entre lo que debió hacerse y se hizo. Algunos de los monovalentes ya están en proceso de reconversión", afirmó.
A su vez, como 2020 estaba muy cerca y este proceso no asomaba, la preocupación entre las asociaciones de profesionales de la salud mental crecía.
"No se iban a poder cerrar los monovalentes porque no se construyó la red de atención basada en un modelo de psiquiatría comunitaria, que tiene en una punta a los hospitales de especialidad reservados para un paciente descompensado, y en la otra, las casas de convivencia, los hospitales de día, los talleres que preparan a los pacientes para una salida laboral", detalla a Clarín Santiago Levin, presidente de la Asociación de Psiquiatras Argentinos (APSA).
Levin remarca que la asociación que preside es nacional y que el acuerdo entre la AMM y el gobierno porteño es local. "No fuimos consultados en ninguna de las etapas del acuerdo", dice. La incertidumbre previa al acuerdo es sobre los pacientes con grandes dificultades para ser externados, por problemas familares, sociales y, claro, habitacionales. Entonces, Gilardi habló de la firma del acuerdo como "un día histórico" para la Salud Pública. ■