Lavagna viajó de nuevo a Córdoba, a la caza de desencantados con Macri
El ex ministro fue Villa María y Río Cuarto. Juan Manuel Urtubey, su candidato a vice, fueron a Tucumán.
Por tercera vez en el año, Roberto Lavagna viajó a Córdoba. En busca del voto del interior visitó Villa María y Río Cuarto, mientras que su candidato a vice, Juan Manuel Urtubey, estuvo en Tucumán. Fueron las últimas recorridas de la fórmula de Consenso Federal antes del acto de cierre que harán mañana en el conurbano.
Con el federalismo como bandera, ambos dedicaron las últimas semanas a viajar por distintas provincias. La esperanza de recuperar parte del caudal de votos que Lavagna cosechó en Córdoba durante su aventura presidencial de 2007 hizo que ese sea su destino más repetido.
“Córdoba tiene un peso político, económico y cultural que la transforma en un centro de atención en una campaña. En mi caso particular, hay un recuerdo de la elección presidencial de 2007 donde le ganamos a Cristina (Kirchner). Tiene ese estímulo adicional”, reconoció el economista.
A diferencia de las dos primeras visitas, esta vez apuntó directo a dos de las ciudades más importantes del interior cordobés: Villa María y Río Cuarto. En ambas, en las legislativas de 2017 ganó Cambiemos y el lavagnismo aspira a conquistar a los desencantados con Macri, que bajo ningún aspecto votarían al Frente de Todos, en una provincia muy refractaria al kirchnerismo.
Durante su estadía, Lavagna visitó empresas pyme, encabezó un almuerzo con empresarios, dio entrevistas a medios locales y recorrió centros comerciales.
Insistió con el voto anti polarización y llevó sus propuestas para “ponerle plata en el bolsillo a la gente”.
Con un mensaje más político, Urtubey viajó Tucumán. “La falta de propuestas de quienes integran esta grieta desnuda la verdad de un gobierno que no pudo solucionar los problemas de la gente, y uno anterior que tiene a la mitad de su gabinete preso”, disparó durante una actividad con sus candidatos a diputados.
En el norte, el oficialismo aparece en caída y el salteño quiere capitalizar los votos de los desilusionados en esa zona donde tiene mayor nivel de conocimiento e imagen positiva. ■