Absuelto como represor, Milani quedó en libertad
El Tribunal Oral Federal de La Rioja, en fallo dividido, lo declaró inocente del secuestro de un padre y un hijo. La fiscal había solicitado 18 años de prisión. Aún tiene otras dos causas.
Un tribunal de La Rioja absolvió y liberó al general que Cristina nombró en el Ejército. Lo enjuiciaron por secuestro y torturas de dos personas en 1977. Habían pedido 18 años y la familia 20. Ahora, irá a otro juicio por la desaparición de un conscripto.
Luego de un proceso oral y público que arrancó el 3 de mayo pasado, el ex jefe del Ejército, César Milani fue absuelto ayer en la causa por el secuestro y la tortura de Pedro Olivera y su hijo Ramón, en 1977. Lo resolvió el Tribunal Oral Federal de esa provincia, integrado por los jueces Julián Falcucci, Jaime Díaz Gavier y Enrique Lilljedahl, que ordenó su inmediata liberación.
La absolución por el secuestro de los Olivera fue por voto dividido y por las torturas en forma unánime, pero aún los fundamentos del polémico fallo se conocerán el 9 de septiembre.
Por estos hechos vinculados a los Olivera, la fiscal federal Virginia Miguel Carmona había solicitado una condena a 18 años de prisión para Milani, mientras que la querella que representa a la familia Olivera pidió 20 años de cárcel.
En fuentes judiciales llamó la atención la enorme diferencia entre los jueces y la fiscal a la hora de evaluar la conducta de Milani en 1977 cuando era subteniente en La Rioja. Algunos de los jueces que lo absolvieron tienen simpatías kirchnerista como Gavier quien había comparado, en declaraciones públicas, al gobierno de Mauricio Macri con la dictadura (Ver página 7).
De todos modos, Milani deberá enfrentar el juicio oral por la desaparición de su ayudante, el soldado Agapito Ledo, durante el Operativo Independencia en Tucumán. Allí está acusado por haber falseado un acta al escribir que Ledo “había despertado”. Además, tiene otro juicio por supuesto enriquecimiento ilícito en proceso (Ver página 6).
El otro acusado de detención ilegal y tortura de los Olivera, Alfredo Santacrocce, para el que se pedía una pena de 12 años de prisión, también fue absuelto.
En cambio, en la misma sentencia sí se condenó a otros siete ex militares a penas de hasta 10 años de prisión por crímenes de lesa humanidad cometidos sobre otras personas.
Horas antes en su última exposición frente a los jueces, Milani -vestido con el uniforme de general- había pedido su absolución, quien había proclamado que "estoy no pie, no me quebrarán".
La absolución de Milani fue festejada por la titular de las Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y repudiada por las víctimas o familiares de las víctimas de secuestros y torturas concretados por el batallón de ingenieros de La Rioja donde Milani actuó como subteniente (Ver página 6).
A Milani lo detuvieron en febrero de 2017 en La Rioja, en el marco de la causa que investigó la detención ilegal de Pedro Adán Olivera, su hijo Ramón Alfredo Olivera y Verónica Matta ocurridas en 1977.
La orden fue librada por el juez federal Daniel Herrera Piedrabuena, quien lo imputó por "imposición de tortura agravada, allanamiento ilegal y privación ilegal agravada".
Si bien el ex general negó una y otra vez su participación, lo cierto es que en más de una oportunidad había sido reconocido por las víctimas. En la madrugada del 12 de marzo de 1977, un grupo de tareas secuestró a Pedro Olivera en su casa en el barrio ferroviario de La Rioja.
Estuvo desaparecido por dos días en un centro clandestino en donde dijo haber sido brutalmente torturado hasta quedar hemipléjico. Según testigos, quien lo había detenido era Milani, por entonces un joven oficial.
Ese mismo día, Ramón fue secuestrado en su trabajo y lo torturaron durante diez días. Según su testimonio, Milani lo condujo ante el juez Roberto Catalán -también investigado- para "blanquearlo" y en el tribunal lo acusó de pertenecer al Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). "A vos te cortamos la carrera justo", le habría dicho, antes de que lo dejaran preso cuatro años en la Unidad 9 de La Plata.
Durante el kirchnerismo, la carrera del ex general Milani fue siempre en ascenso. En 2007, siendo coronel, fue puesto al frente de la Subdirección de Inteligencia del Estado Mayor del Ejército, y el 31 de diciembre de ese mismo año fue promovido a general de brigada. El 30 de enero de 2008 lo nombraron director general de Inteligencia. El 31 de diciembre de 2010 ascendió a general de división. El 4 de enero de 2011 fue designado subjefe del Ejército Argentino, y en julio de 2013 subió el último peldaño, diciendo que el “Ejército nacional y popular” apoyaba a Cristina Kirchner.
Fue jefe del Ejército hasta junio de 2015 cuando recién el CELS, que preside Horacio Verbitsky, objetó en el Senado su ascenso, propuesto por Cristina, a teniente general. Luego se peleó con el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, en una acto en el monumento a la bandera, por el ascenso a coronel mayor de un coronel de inteligencia y presentó su renuncia. ■