Macri repasó la agenda electoral con Pichetto, Vidal y Larreta en Olivos
Compartieron un almuerzo con Peña, Frigerio y Durán Barba. Después, el Presidente se fue a Los Abrojos.
En plena veda, el Presidente siguió la agenda de su gestión en Olivos y reunió en un almuerzo a dirigentes de su extrema confianza. Quienes lo vieron, aseguraron a Clarín que se mostró “distendido y de buen humor” y “en sintonía” con Miguel Pichetto.
Entre los comensales también estuvieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña; la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal; y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Más tarde, Macri subió a Instagram una foto en el jardín, en la que posó con Pichetto, Larreta y Vidal.
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, fue otro de los comensales. Jaime Durán Barba, llegó a Olivos acompañado por su socio, el español Santiago Nieto, y acaparó buena parte de la cita, en la que degustaron una sopa de calabaza y pescado con alcauciles.
El consultor ecuatoriano repasó la performance de Juntos por el Cambio durante la campaña y transmitió “tranquilidad”. Y volvió a destacar a Pichetto, cuya incorporación - según su criterio-, fue uno de los motivos que contribuyó para que el oficialismo pudiera renovar expectativas.
Macri asintió los elogios, pero a modo de broma les reclamó a los suyos la libertad discursiva de la que goza el senador. “A él le dejan decir lo que quiera”, sonrió. “Hubo buena onda”, describieron cerca del mandatario. En el Gobierno consideraron clave la jornada sin sobresaltos en términos económicos, la gran preocupación en la previa.
En simultáneo, Peña trazó reuniones con su equipo en Olivos. El secretario de la Presidencia, Fernando de Andreis, encabezó la mesa de comunicación, de la que participaron el secretario del área, Jorge Grecco; y su "número 2", Gustavo Gómez Repetto; la subsecretaria de Comunicación Presidencial, Fátima Micheo; y el equipo de discurso, a cargo de Julieta Herrero. Esta mesa es clave, ya que e suele debatir la conveniencia de cada paso que da el Presidente. Y también lo que dice. Por lo que, en este caso, evaluaron los distintos escenarios que se pudieran darse mañana.
El equipo de comunicación pidió que Frigerio y el secretario de Asuntos Políticos y Electorales, Adrián Pérez, salieran al cruce de las denuncias de la oposición en torno a la posibilidad de un fraude.
Frigerio reclamó a la oposición "que se maneje de manera responsable en una instancia tan clave y no genere un clima de incertidumbre” y prometió que "antes de la medianoche va a estar el resultado del escrutinio provisorio". Pérez indicó que "está garantizada la trazabilidad y el control de todas las fuerzas políticas" en el recuento (ver aparte).
Por la tarde, tras reunirse con su amigo y titular del BICE, Francisco "Pancho" Cabrera, Macri mantuvo la rutina de cada fin de semana y se instaló en la quinta Los Abrojos. Mañana irá a votar en la Escuela N°16, en el barrio de Palermo, junto a la primera dama, Juliana Awada, quien vota a dos cuadras, en otro colegio.
Al mismo tiempo, Awada acompañará a su hija Valentina, fruto de su relación con el empresario belga Bruno Barbier, quien vota por primera vez. Al búnker, en Costa Salguero, Macri arribará cerca de las 22, cuando se supone que ya se conocerá una tendencia de los resultados..
Lógico, será el último en hablar. Se prevé que sea antes de la medianoche, cuando haya un buen caudal de votos escrutados. Antes, hablarán Frigerio, los jefes campaña (Peña, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli y el jefe de Gabinete provincial, Federico Salvai), los precandidatos a legisladores de los tres distritos; y, por último, Larreta y Vidal. ■