Trump demora hasta diciembre los aranceles a bienes electrónicos chinos
Se trata de celulares, computadoras y otros productos. Debían entrar en vigor desde septiembre próximo.
En una decisión sorpresiva, el gobierno de Estados Unidos anunció ayer que postergó hasta diciembre parte de la suba de aranceles del 10% a una serie de productos chinos que debían entrar en vigencia el 1º de septiembre. La medida, que afecta a los productos electrónicos, alentó a los mercados financieros.
Esta postergacón, más un contacto telefónico entre los principales funcionarios comerciales de Estados Unidos y China, sugiere una posible tregua en la guerra comercial entre ambas potencias, que se había intensificado en las últimas semanas.
“Se ha determinado que los aranceles deben retrasarse hasta el 15 de diciembre para ciertos artículos”, señaló la Oficina del Representante de Comercio Exterior de Estados Unidos (USTR) en un comunicado.
Los productos de este grupo incluyen, por ejemplo, teléfonos celulares, computadoras portátiles, consolas de videojuegos, ciertos juguetes, monitores de computadora y algunos artículos de calzado y ropa.
Para otra cantidad de bienes, sin embargo, los aranceles sí entrarán en efecto a partir de septiembre.
La USTR también informó que algunos productos se han eliminado del listado de bienes que serán sancionados con gravámenes por motivos de “salud, seguridad, seguridad nacional y otros factores”, pero no especificó cuáles.
El gobierno de Donald Trump había advertido el pasado 1 de agosto que impondría nuevos aranceles del 10% sobre importaciones chinas valoradas en 300.000 millones de dólares a partir de septiembre, a pesar de que las negociaciones comerciales entre los dos países siguen en pie.
Algunos expertos han señalado que la decisión anunciada ayer, que fue recibida con alzas importantes en los mercados financieros mundiales, refleja la creciente preocupación en el Ejecutivo de Trump sobre el impacto de la guerra comercial con Beijing en la economía de EE.UU.
En rigor, cuando Trump anunció el nuevo paquete de aranceles, los minoristas estadounidenses pusieron el grito en el cielo por los efectos negativos que podría tener la decisión.
Ayer, al anunciar la postergación, el jefe de la Casa Blanca aclaró: “Estamos haciendo esto para la temporada navideña en caso de que algunos de los aranceles tengan un impacto en los consumidores estadounidenses, pero hasta ahora realmente no han tenido ninguno”.
Al mismo tiempo, el representante comercial estadounidense, Robert Lighthizer, habló ayer con el vicepremier chino, Liu He, y tiene prevista otra llamada en dos semanas, según informaron a la prensa fuentes de la USTR. El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, también participó.
Los negociadores estadounidenses y chinos se reunieron en Shanghai a fines de julio por primera vez desde que las conversaciones colapsaron en mayo, y deben celebrar otra ronda de reuniones en Washington en septiembre.
Sin embargo, el deterioro de las relaciones en las últimas dos semanas arrojó dudas sobre si las negociaciones se llevarían a cabo, y el viernes Trump indicó que la próxima reunión podría no ocurrir pues, según djio, Washington “no está listo para llegar a un acuerdo”. ■