Argentina y Brasil, tan cerca y tan lejos
Brasil es el principal comprador, por no decir casi único, de nuestra flaca industria. Hablar de la industria es hablar de valor agregado y de tecnología y es hablar de empleo de calidad. Y por si esto fuera poco, la economía brasileña es cuatro veces la nuestra y varias veces más la inversión extranjera real, que llegaría este año a US$ 85 mil millones y el superávit comercial de US$ 52 mil millones. Es de lejos la potencia del Mercosur y el país clave del acuerdo con la Unión Europea.
Con ese país o con el presidente de ese país se está peleando Alberto Fernández, el candidato con más chances de ser el nuevo presidente de la Argentina. Hay una secuencia de cortocircuitos clara como el agua clara: •
Hace mes y medio, Fernández visitó al ex presidente Lula, preso por corrupción. Lo llevó un ex ministro de Lula al que Fernández había llevado ante el Papa. Palabra más, palabra menos, Fernández dijo entonces que Lula preso probaba que no había justicia en Brasil. •
“Si ese zurdaje (esquerdalha) vuelve a la Argentina, nosotros podremos tener en Río Grande do Sul un nuevo estado de Roraima”, provocó este lunes Bolsonaro. Roraima es donde llegan los venezolanos que huyen como pueden de Venezuela. •
Al día siguiente, Fernández reaccionó sin medir palabras. Dijo: “No me gustan los bravucones ni las bravuconadas”. Y enseguida calificó a Bolsonaro de “misógino, racista y violento”. Se olvidó de que si las Paso dijeron algo es que él está a punto de representar al país y ser un par de Bolsonaro.
En su ayuda, el PJ salió a pedirle a Macri que impida a Bolsonaro meterse en nuestros asuntos y en ayuda de Bolsonaro salió su ministro de Economía, Paulo Guedes. Dijo que si gana el kirchnerismo,
donde hoy ejerce la presidencia. Bolsonaro acaba de respaldar la amenaza.
En estas décadas el mundo se pobló de pactos comerciales pero la cosecha del Mercosur ha sido
Prohibido desde siempre que sus socios acuerden con terceros, encima fue víctima de caprichos ideológicos. La cuestión clave es cómo revitalizar una marca que aun desprestigiada sigue siendo una marca en el mundo y que nos identifica en el mundo. Trump puso el tema de la barrera del Mercosur en la agenda con Brasil, al que quiere de aliado en el tablero global. Pretende venderle con arancel cero. Con ese beneficio, Argentina le coloca a Brasil la mitad del trigo que consume: unas 7 millones de toneladas año, más de 1.500 millones de dólares. Hay mucho trigo en el mundo y en especial en Estados Unidos, que es el mayor exportador. Nuestra economía depende mucho de la brasileña,
Hay en juego un comercio total de 26 mil millones de dólares al que ahora se suma el muy esperado acuerdo con la Unión Europea que puede ser una oportunidad para la Argentina.
En Europa muchos dudan y en Brasil también. Cualquiera sea aquí el resultado electoral, Argentina y Brasil seguirán donde están. Tan cerca o tan lejos como decidan sus presidentes.
Fernández visitó a Lula, preso por corrupción. Bolsonaro ahora lo provocó y Fernández respondió con un ataque personal.