Los sabios consejos de Acosta y Biaggio
Referentes. Gaich cuenta cómo lo ayudaron dos especialistas del club.
San Lorenzo fue el club que le abrió las puertas a Adolfo Gaich en 2014 luego de no quedar en River, Lanús y Belgrano. Por eso, este lungo delantero de 190 centímetros se acuerda de cada uno de las personas que lo ayudaron para poner sus pies en Primera: “Antonio Mur, que fue quien me vio allá en Córdoba y me trajo, Hugo Tocalli, Fernando Kuyumchoglu, Claudio Biaggio, todos fueron importantes y les estoy agradecido”. Adolfo fue campeón en la Sexta categoría y de allí saltó a la Reserva. Su cuota goleadora nunca faltó en cada uno de los equipos que integró en la cantera cuerva. Apenas pisó la Ciudad Deportiva azulgrana, Gaich vivió un tiempo en la pensión. Ahora ya transita la experiencia de vivir solo.
-¿Hugo Tocalli es muy exigente?
-Sí, exige muchísimo Hugo. Yo lo tuve en la Reserva y me di cuenta. Pero con los compañeros sabíamos que era necesario para sacar lo mejor de nosotros.
-¿Y es cierto que una vez te retó y te tuvo que consolar el Beto Acosta? -Ja ja, sí. Fue durante un ejercicio que había que perfilarse y a mí no me salía y no podía meter la pelota en el arco. Tocalli me exigía y yo me puse muy nervioso. Y vino el Beto para consolarme y tranquilizarme. Siempre me acuerdo de esa charla que tuvimos.
-El Pampa Biaggio fue quien te puso en Reserva y en Primera, ¿qué tanto te sirvió que sea un referen
te en tu puesto?
-Mucho. Me dio consejos de cómo parar la pelota, de cómo jugar de espaldas al arco, de cómo moverme entre los centrales. Porque la verdad es que cuando subí a Reserva yo estaba en Sexta y recién estaba empezando ahí.
-¿Te dolió la manera en que se fue del club?
-Sí, claro. Por la forma en que fue criticado. Yo tengo un afecto especial por él, porque fue quien me dio la chance. Y cuando pasa algo así es lógico que me pegue más que al resto. Los resultados en el último tiempo no lo ayudaron mucho y este fútbol es así. ■