Clarín

Había un robo en la vereda, fue a cerrar la persiana y lo mataron de un balazo en el pecho

Rodrigo González estaba en una fiesta de cumpleaños familiar. El agresor escapó y aún no fue identifica­do.

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Cuando Rodrigo “El Potro” González (35) escuchó los gritos, atinó a cerrar la ventana. Afuera, un ladrón que escapaba herido de un intento de robo quiso asaltar a un invitado que había salido de la casa a buscar una guitarra en su auto estacionad­o en la vereda. El suegro del dueño de casa logró correr y cerrar la puerta a tiempo, pero no se esperaba que el asaltante disparara: uno de los tiros atravesó la ventana y mató a Rodrigo, empleado de una empresa de cable y papá de un nene de 7 años.

La noche fatal fue este sábado alrededor de las 21.15, en Villa Galicia, un barrio de Temperley. En la casa de la calle Zuviría al 400 la familia estaba reunida para celebrar el cumpleaños de la suegra de Sebastián González (37), uno de los cinco hermanos de Rodrigo, que vive allí.

“El suegro de Sebastián salió a buscar una guitarra al auto y en la vereda se dieron cuenta del intento de robo. La esposa empezó a gritar que se metiera para adentro y él cerró la reja rápido. Llegó a entrar, pero el tipo empezó a disparar. A Rodrigo le salió bajar la persiana para proteger a todos, y le dieron", contó a Clarín un amigo de la víctima.

Lo cierto es que este era el segundo intento de robo de este ladrón, que no estaba solo. Apenas había corrido unos cien metros desde Iriarte al 800 donde, según fuentes policiales, intentó asaltar a un hombre de 65 años. Resultó que la primera víctima era un policía federal retirado que portaba su Bersa Thunder 9 milímetros.

“Cuando ingresaba a su casa arriba de su auto lo intercepta­ron dos hombres que trataron de sustraerle el vehículo. Uno de ellos, de forma imprevista, empezó a disparar. Él repelió la agresión hiriendo a uno de los ladrones. Escaparon corriendo y se separaron sin lograr llevarse el auto. El herido, se sospecha, es el que termina baleando a la siguiente víctima”, relataron fuentes policiales.

El asesino corrió cien metros más hasta la esquina de Ituzaingó y Vicente López, donde le robó el auto a otro hombre. “Habría escapado hacia Lanús”, explicaron las fuentes.

Rodrigo trabajaba para DirecTV. Fanático de Racing, vivía a metros de la estación de Temperley. Estaba casado con Florencia, de 31 años. Juntos tuvieron a Santiago.

“Te arrancaron la vida amigo, siempre te vamos a recordar con esa locura que nos hacía felices. QEPD”, publicó su amigo de la infancia Jorge Lugones. En diálogo con Clarín, contó: “Siempre estábamos juntos, desde los 5 años. Sus padres están destruidos, su mujer también. Nos robaron a un genio, a un pibe espectacul­ar”, lamentó.

“Te fuiste de una manera injusta. Nunca te vamos a olvidar. Esos momentos de trabajo y risas, de asados en el camping en familia. Y de gran compañero que eras, hermano", publicó Rubén Aguilar, otro amigo.

La investigac­ión está en manos de la UFI N° 4 de Lomas de Zamora, a cargo de Leonardo Kaszewski, donde optaron por no dar informació­n. Al cierre de esta edición no había ningún detenido ni identifica­do, aunque investigab­an a un hombre herido que se presentó a una Unidad de Pronta Atención (UPA) cercana al lugar del crimen con una herida de bala. ■

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Víctima. Rodrigo tenía 35 años, era padre de un nene de 7 años y trabajaba en DirecTV.

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