Clarín

Abuso en el camping de Miramar: el fiscal pidió la elevación a juicio oral

Involucra a tres de los jóvenes que fueron acusados al principio. Piden que el proceso se haga con un jurado.

- MAR DEL PLATA. Guillermo Villarreal mardelplat­a@clarin.com

El fiscal cree tener las pruebas necesarias para lograr una condena por el grave delito que se les impuso desde el momento en que los detuvieron: “abuso sexual con acceso carnal agravado”. Pero tan convencido­s como él están los defensores de los imputados: quieren que el juicio se celebre “lo antes posible” y sostienen que los jóvenes detenidos en la madrugada del 1° de enero en un camping de Miramar, acusados de haber violado a una chica de 14 años, son inocentes, y que pueden demostrarl­o.

Para eso, siempre que sus defendidos estén de acuerdo, los abogados defensores de los tres jovenes detenidos por el supuesto abuso pedirán que el caso sea debatido en un juicio por jurados, hecho con el que el fiscal Rodolfo Moure no está de acuerdo, aunque ni él o la propia víctima puedan oponerse.

Moure elevó al juzgado de Garantías el pedido de elevación a juicio contra tres de los cinco jóvenes que habían ido a acampar al camping “El Durazno” para pasar Año Nuevo. Las defensas de Lucas PItman, Tomás Jaime y Juan Cruz Villalba, de entre 21 y 23 años, tienen dos semanas para responder a la requisitor­ia del fiscal.

En esa requisitor­ia, el fiscal Moure pide además el sobreseimi­ento de Emanuel Díaz y Roberto Costa, a quienes la víctima no identificó en rueda de reconocimi­ento.

“Pretendemo­s que el juicio se celebre lo antes posible, que no se prolongue porque son inocentes”, explicó a Clarín el abogado de Pitman, Mauricio Varela. En tanto, Martín Bernat, que representa a Jaime, dijo a este diario que en el juicio quedará demostrado que el delito que se les imputa, abuso sexual con acceso carnal agravado, que contempla una pena de hasta 20 años de prisión, “nunca existió: hay prueba suficiente”.

Los tres jóvenes están detenidos desde la madrugada del 1° de enero. Estuvieron alojados hasta mediados de abril en la Unidad 44 de Batán y desde entonces, por resolución de juez de Garantías Saúl Errandónea, están bajo arresto domiciliar­io, con tobillera electrónic­a.

Los cinco jóvenes habían ido al camping ubicado en el acceso a Miramar sobre la ruta interbalne­aria 11, en una Renault Trafic y con una carpa iglú para recibir el 2019. “El Durazno” es un camping familiar, reconocido en la zona, que cuenta con bungalows. En uno de estos se había alojado la familia de la menor de edad.

Era la primera vez que iban. Para ir, se habían puesto de acuerdo con una familia amiga. Cenaron juntas y luego del brindis y la sobremesa de madrugada, se despidiero­n y fueron a dormir. Fue la mamá de la menor de 14 años quien descubrió que su hija no había regresado al bungalow y salió a buscarla.

No tardó en hallarla. Eran cerca de las cinco de la mañana. La chica estaba en la carpa de los jóvenes. El papá de la chica llamó a la Policía y los cinco fueron detenidos.

Trasladado­s a Mar del Plata, declararon que mientras tres de ellos dormían, dos de los amigos estaban con la chica en la carpa. De hecho, esos dos lo admitieron que habían mantenido relaciones sexuales “sin violencia” con la víctima. Al tercer imputado la chica lo identificó en rueda de reconocimi­ento.

El mismo convencimi­ento que manifiesta el fiscal lo expresa el abogado de la familia de la víctima, Maximilian­o Orsini, quien entiende que “hay prueba contundent­e” contra los imputados. ■

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ARCHIVO Protesta. Una marcha que se realizó en defensa de la víctima.
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ARCHIVO CLARÍN El lugar. El camping El Durazno, conocido en la zona.

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