Demócratas y republicanos condenan el repliegue en Siria
La Cámara de Representantes de Estados Unidos votó ayer miércoles abrumadoramente contra la decisión del presidente Donald Trump de retirar las tropas estadounidenses del norte de Siria, muestra cabal del feroz rechazo de los dos principales partidos a la controvertida política del mandatario.
La resolución, apoyada por demócratas y republicanos, es la primera condena del Congreso a la decisión de Trump, que es considerada como una luz verde del gobierno estadounidense a la ofensiva militar lanzada por Turquía contra las milicias kurdas en el norte de Siria.
La Cámara baja “se opone a la decisión de poner fin a ciertos esfuerzos de Estados Unidos para evitar operaciones militares turcas contras las fuerzas kurdas en el noreste de Siria”, señala la resolución no vinculante aprobada por 354 votos contra 60.
Al mismo tiempo insta al presidente turco Recep Tayyip Erdogan a “cesar inmediatamente acciones militares unilaterales” en la zona y urge a continuar con el apoyo humanitario estadounidense a las comunidades kurdas en Siria.
También pone énfasis en un tema que genera polémica en Estados Unidos. “Una retirada abrupta del personal militar de ciertas partes del noreste de Siria es beneficioso para los adversarios del gobierno de Estados Unidos, incluidos Siria, Irán y Rusia”, sostiene.
Con esta jugada, la Cámara Baja pretende obligar a Trump a que firme o vete esta resolución, aunque aún está por ver si el Senado, controlado por los conservadores, adoptará y votará la condena aprobada ayer. “La medida que hemos considerado hoy envía un rechazo bipartidista inequívoco a la política de Trump en Siria”, señaló uno de los impulsores de la legislación, el demócrata Eliot Engel.
En un duro tono, Engel afirmó que “en las manos del presidente Trump, el liderazgo estadounidense se ha reducido y la política exterior estadounidense se ha convertido en nada más que una herramienta para promover sus propios intereses”. “Hoy dejamos en claro que el Congreso es una rama igualitaria del gobierno y no queremos tener nada que ver con esta política desastrosa”, sentenció el legislador.
Desde el sector republicano también hubo críticas a la estrategia adoptada por el presidente sobre Oriente Medio. “L a retirada de tropas estadounidenses de Siria es la peor decisión de la presidencia de Trump”, aseguró el senador republicano Lindsey Graham, quien a menudo se reúne con el mandatario y es uno de sus partidarios más fuertes e importantes en el Congreso.
“Para aquellos que piensan que Oriente Medio no es un asunto de Estados Unidos, recuerden el 11-S. Teníamos esa misma actitud el 10 de septiembre de 2001”, puntualizó Graham, refiriéndose al ataque terrorista que trastocó la política exterior de Washington.
En más de una ocasión, Trump insinuó que EE.UU. tiene poco interés en el Oriente Medio debido a que geográficamente está lejos. Es una noción criticada por amplios sectores políticos norteamericanos. ■