Para el celular: cada vez más potentes y portátiles
Los nuevos modelos incluyen la tecnología de conexión TWS, que permite vincular dos canales sin necesidad de cables. Traen baterías que ofrecen una autonomía de hasta 20 horas.
Los parlantes inalámbricos lograron fortalecer su vínculo con el público a través de modelos portátiles, con un sonido consistente y un alto grado de innovación. El nuevo hito es la tecnología de conexión True Wireles Stereo (TWS), que permite vincular dos canales independientes a través de Bluetooth, generando una sensación envolvente. Además, sus baterías disponen de mayor autonomía, son más livianos y recargan rápidamente.
Hay algunas marcas que ofrecen dos bafles sin cable ya combinados; otras los venden individualmente y es posible ir sumando nuevas unidades a la red acústica. La clave para que suenen en simultáneo (como los auriculares AirPods de Apple) es que compartan marca y modelo. Cuestan entre $2.000 hasta $12.000.
“La principal ventaja de la tecnología de vinculación entre pares, conocida como TWS, es la omnidireccionalidad. Es decir, son unidades que mediante un sonido 360° consiguen que la música fluya de una punta a la otra del ambiente. También está la opción de utilizar cada parlante de manera separada, para que dos personas diferentes, disfruten de cada producto de forma independiente”, sostuvo Gonzalo Esposito, Territory Manager de Klip Xtreme y Xtech.
En lugar de los equipos grandes y pesados, que son indicados para animar una fiesta o escuchar en espacios abiertos, el que busque una experiencia más íntima, puede apuntar a los equipos llamados unibody (pequeños y macizos), resistentes al polvo y las salpicaduras.
Para vincular los bafles entre sí, disponen de un botón que realiza el enlace en forma automática. Además, cada canal incluye una tecla de encendido y una serie de controles para adelantar, retroceder o pausar la canción. La principal ventaja de estos parlantes TWS es que es factible extender la capacidad sonora a otros ambientes de la casa. Conectándolo a un SmartTV, la información se transmite por separado a los canales izquierdo y derecho, obteniendo un sonido estéreo ampliado y envolvente, como en las salas de cine.
Esta conexión inalámbrica está diseñada para que el origen (celular o tableta) del sonido funcione, como máximo, a una distancia de entre 12 y 20 metros. Cuanto uno más se aleja del receptor, la pérdida de calidad o la interpolación será cada vez mayor, hasta perder la señal por completo.
Para saber si la calidad del producto está a la altura de las expectativas, lo mejor es probarlos antes de tomar una decisión. Para escuchar música a tope, es crucial que el sonido no sature cuando se aumente el volumen. Para una sintonía estándar habrá que recurrir a un modelo que transmita fielmente los agudos y sonidos medios. Para fanáticos de los bajos, se recomienda un equipo que ofrezca un ecualizador regulable. En cuanto a lo técnico, hay muchas formas de medir la potencia, aunque la de mayor consenso es la que se expresa en vatios RMS reales. En la letra chica de la regla se indica que a mayor potencia, mayor señal de sonido (o sea, más alto). Eso sí, una potencia mayor no implica necesariamente una mejor calidad sonora.
En cambio, lo que sí tiene una gran influencia es el tamaño de los drivers o emisores de sonido. Lo ideal es que tenga al menos uno para cada rango de frecuencias (bajas, medias y altas). Aunque los más avanzados pueden tener dos o más por rango.
En cuanto a la potencia en bruto, está directamente relacionada con el tamaño del parlante. Por cuestiones puramente físicas, un bafle de 1,5 pulgadas no puede ofrecer la misma nitidez y potencia sonora que uno 3 veces más pequeño. Respecto a la autonomía, cuanto mayor es la batería, más horas se podrá escuchar sin enchufarlos, aunque el parlante será más pesado. El rango varía de las 2 a las 15 horas (a un nivel de sonido medio). A medida que sube el volumen, aumenta el consumo. ■