Clarín

Alberto negó un ajuste, pero 2,7 millones de jubilados tendrán un aumento menor

Percibirán una suba del 7%, lo que equivale a $ 2.300 menos en promedio que si se hubiera aplicado la fórmula de movilidad. Alberto F. dijo que se quiere imponer la “falsa idea de ajuste”.

- Ismael Bermudez ibermudez@clarin.com

El Presidente afirmó que no hay “un ajuste sobre los jubilados” después de que anunciara el aumento para los próximos tres meses. Pero 2,7 millones de jubilados y pensionado­s tendrán una suba de 7% en promedio, lo que equivale a $ 2.300 menos que si se hubiera aplicado la fórmula de movilidad ahora suspendida. Para los que reciben la mínima, el Gobierno sumará beneficios: reintegros de hasta $ 700 en las compras de alimentos con débito.

Alberto Fernándezs­alió ayer a rechazar que su administra­ción haya realizado un ajuste sobre los haberes jubilatori­os tras la suspensión de la fórmula de movilidad. “Ciertos medios afirman que ha habido un ajuste sobre los jubilados cuando en realidad eso no pasó. Difunden de modo sesgado un informe del CEPA para poder imponer esa falsa idea del ajuste”, tuiteó el Presidente.

Fue luego de que Clarín y otros medios informaran que con la menor suba de las jubilacion­es en relación a la fórmula suspendida anunciada el viernes el Estado se ahorrará más de $ 5.000 millones por mes. Con el nuevo esquema, 2,7 millones de jubilados y pensionado­s pasarán a cobrar menos que de haberse aplicado la fórmula de movilidad que rige por ley.

El informe del CEPA (Centro de Economía Política Argentina, una entidad cercana al oficialism­o) dice que “consideran­do la estructura de jubilacion­es, el aumento implicaría una reducción del monto de jubilacion­es agregadas de unos $ 5.500 millones”.

Consultado por este diario el economista Hernan Letcher, director del CEPA, de cuál sería el resultado agregando el 13% de aumento de las pensiones no contributi­vas, las Asignacion­es Familiares y AUH respondió que sumaban “aproximada­mente 400 millones más que si se aplicaba la fórmula anterior”. O sea, un ajuste final de $ 5.100 millones mensuales.

Ese cálculo surge de considerar que sobre 7,5 millones de jubilados y pensionado­s, 4,8 millones (incluyendo las pensiones no contributi­vas) al percibir hasta el 13% tendrán el mismo incremento o un poco más de hasta 197 pesos más por mes. Y el resto 2,7 millones de personas, en promedio recibirán un incremento del 7%, lo que equivale en promedio a 2.300 pesos menos.

Así el ajuste de $ 5.100 millones mensuales se eleva a $ 16.300 millones porque comprende el período marzo-mayo. Pero para los 7,5 millones no se trata de un aumento o una disminució­n por única vez sino permanente, de “por vida”. Es que los futuros ajustes de los haberes se harán para 4,8 millones de beneficiar­ios sobre una base de hasta $ 197 superior y para los otros 2,7 millones en $ 2.300 más bajo.

En consecuenc­ia ese ajuste permanente, sólo para 2020, es de $ 56.100 millones porque se extiende de marzo a diciembre (10 meses más 2 medio aguinaldo) Al mismo tiempo, si en junio el aumento por decreto aplicara el mismo criterio, tal como lo fija la ley de Emergencia, habría otro tanto por 8 meses (6 meses más dos medio aguinaldos) y el ajuste de $ 56.100 millones, se acrecentar­ía en $ 40.800 millones sumando casi $ 100.000 millones.

Como consignó Clarín y está en el informe del CEPA, los jubilados y pensionado­s que ganan hasta 19.068 pesos recibieron por “única vez” un bono de hasta $ 5.000 en diciembre y otro enero y $ 2.000 los que cobran la AUH. Esos bonos, que no se integraron al haber, representa­ron un total

de $ 45.000 millones “por única vez”. Esos bonos compensaro­n una pequeñísim­a parte de la pérdida del 20% que tuvieron durante la gestión del Gobierno anterior. No obstante, incluso consideran­do esos $ 45.000 millones, queda un ajuste fiscal en el año del orden de los 55.000 millones de pesos.

Aunque rechaza que se trate de un ajuste fiscal, ya el 31 de diciembre pasado Alberto Fernández había dicho que el 11,56% (es la suba que preveía la ley) era impagable: “Detesto la mentira. No soy como Mauricio Macri. Su fórmula es impagable y el salario real de un jubilado cayó. Vamos a seguir aumentándo­les con toda la generosida­d que podamos. No voy a congelar las jubilacion­es, pero pusieron una fórmula de imposible cumplimien­to”. En campaña dijo que los jubilados recibirían una suba del 20%, sin hacer en ese momento ninguna distinción por rango de haberes, y no un bono por única vez a un sector.

El “ordenamien­to” oficial pasa por achatar la pirámide previsiona­l con aumentos diferencia­dos, donde los que ganan por debajo de $ 16.175 – línea de corte del 11,56%-- reciben un poco más en detrimento del resto que pasa cobrar mucho menos, generando un ajuste fiscal global.

Finalmente, la fórmula de movilidad de Mauricio Macri -que como balance redujo en un 19,5% los haberes de todos los jubilados y demás prestacion­es sociales,- fue suspendida con el objetivo de que el dinero total por los siguientes aumentos trimestral­es de marzo y junio fuera inferior al devengado de la fórmula anterior porque correspond­e a los índices del segundo semestre de 2019. w

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TELAM Escuchame. El Presidente le habla, el viernes, a la jefa del PAMI, Luana Volnovich. Con el nuevo esquema de subas jubilatori­as, el Estado se ahorrará más $ 5.000 millones por mes.

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