River y la vicepresidencia de AFA: la maldición que empezó en una pelea
Desde que Passarella chocó con Grondona la presencia del club estuvo marcada por la inestabilidad.
“Mirá Julio… Estás viejo, esto no va más. Te tenés que ir Julio, te tenés que ir para bien del fútbol argentino y de la AFA. Esto es un desastre”. Con esa frase, cargada de furia, Daniel Passarella irrumpió en la reunión del Comité Ejecutivo de AFA para pedirle la renuncia al por entonces todopoderoso Julio Grondona, quien le respondió: “Vos me venís a decir a mí que me vaya, vos que estás matando a River, vos…" Desde ese martes 17 de mayo de 2011, el Kaiser y Grondona no volverían a verse. Don Julio murió el 30 de julio de 2014.
Aquella pelea sucedió dos días después del pésimo arbitraje de Patricio Loustau en un Superclásico en la Bombonera en el que Boca le gan´0 2-0 a un River que empezaba a caminar por la cornisa del descenso.
Esa reunión en la que Passarella chocó con Grondona no solo produjo la pelea irreconciliable sino la pérdida de la presidencia de la AFA de River. El cargo quedó para Luis Segura y. River recién volvería a recuperar el cargo tres años y medio después de aquel desplante.
Tras el deceso de Grondona, Segura asumió la presidencia de la AFA inmediatamente. Y la vicepresidencia primera había quedado vacante. En noviembre de 2014 Rodolfo D’Onofrio, fue nombrado vicepresidente primero de la AFA
D’Onofrio se mantuvo activo en la política de AFA dado su rol de vicepresidente hasta que se produjo la involución política que desembocó en el 38-38. El mandamás millonario renunció en julio de 2016, días antes de que lo hiciera Segura. Luego, intervino la FIFA y designó la Comisión Normalizadora, encabezada por Armando Pérez.
En octubre, Mauricio Macri decretó que el Estado iba a dejar de financiar en 2017 la televisación de los torneos nacionales, el principal ingreso de los clubes, y el golpe fue muy duro. Después de la asunción de D'Onofrio como integrante de la Comisión de Grupos de Interés de la FIFA a pedido de la Conmebol, los campeonatos no se reanudaron en febrero ya que los futbolistas iniciaron una huelga por la deuda millonaria de los clubes. Recién en marzo se reinició la actividad, se acordó un contrato por la TV con Fox/Turner y fue elegido Tapia como presidente en una elección con lista única..
Desde mitad de 2016, entonces, River estaba afuera de la AFA. D’Onofrio no formó parte de esa lista encabezada por Tapia. “Nos ofreció una vocalía cuando River históricamente tuvo la vicepresidencia”, comentó el titular del club de Núñez. Y en los pasillos de Udaondo y Figueroa Alcorta creen que Daniel Angelici, ex presidente de Boca presionó para que River no tuviera puestos de poder. Las vicepresidencias fueron para el propio Angelici (Boca), Hugo Moyano (Independiente) y Guillermo Raed (presidente de Mitre de Santiago del Estero). Entonces, River votó en blanco. Y tuvo su representación en Superliga, con Jorge Brito como vicepresidente primero de esa entidad.
El tiempo pasó y las diferencias políticas continuaron, a pesar de que en los últimos meses D’Onofrio veía una postura distinta en sus pares. “Creo que se dieron cuenta de que se equivocaron y estoy notando una actitud totalmente distinta. No podemos estar fuera de la AFA. Es la primera vez que sucede en la historia y les marcamos que era un error”, afirmó el presidente de River en una entrevista con Clarín el año pasado.
Aprovechando el cambio de aire político en el país, en el inicio de este 2020 los dirigentes impulsaron la disolución de la Superliga y que la Primera vuelva a la órbita de AFA. A River, en principio, no le cayó bien esa decisión, pero quedaba solo en un rincón. Tinelli ya se mostraba en fotos con los que antes fueron sus “enemigos” políticos. Y cuando muchos pensaban que D’Onofrio pateaba el tablero o veían especulaciones políticas tras la decisión de que River no se presente a jugar ante Atlético Tucumán por la pandemia del CONAVID-19, erraron el diagnóstico…
D’Onofrio, que busca impulsar el fin de la grieta, aceptó la in recuperó “el lugar institucional que le corresponde a River por historia y por lo que significa para el fútbol argentino “, dijeron desde Núñez. ■