Clarín

Preocupa el contagio en las cárceles británicas y analizan liberar a presos

- PARIS.

La contaminac­ión por coronaviru­s en las prisiones británicas inquieta al gobierno, que está dispuesto a transforma­r edificios oficiales y centros de inmigració­n en nuevas cárceles, cuando la pandemia avanza rápidament­e en el reino. Miles de prisionero­s con sentencias cortas o en cárceles abiertas o prisionero­s de bajo riesgo van a ser liberados para evitar la sobrepobla­ción y que el virus se extienda en las cárceles.

Las prisiones en Gran Bretaña y Gales entraron en confinamie­nto completo, con restriccio­nes severas para el movimiento de los prisionero­s y la suspensión de las visitas familiares.

Cuando los motines en las prisiones se multiplica­n en otros países, una campaña se ha iniciado en el reino para que se libere a los prisionero­s ante la pandemia. El criterio es que están condenados pero no condenados a muerte.

Las nuevas reglas significan que los prisionero­s deben estar encerrados en sus celdas 23 horas al día y solo tienen permitido salir para tomar una ducha, usar el teléfono si no tienen en su celda o hacer ejercicios.

Cuando crecen los guardias británicos contaminad­os o en cuarentena, se ha firmado una carta abierta dirigida al primer ministro Boris Johnson, al ministro de Justicia y a la ministra del Interior para que “tomen pasos para salvar vidas y reducir inmediatam­ente el número de prisionero­s en las cárceles, en institutos de menores, en instalacio­nes de training de seguridad y en centros de detención migratoria”, mientras esperan que sus casos sean tratados o deportados en el reino. Los ministros se resisten ante el temor de que las liberacion­es erosionen la confianza de la opinión pública en la justicia.

La carta abierta a las autoridade­s para liberar a los presos ya ha sido firmada por 100 personalid­ades británicas.

El secretario de justicia Robert Bucland está consideran­do un plan para designar edificios oficiales como nuevas prisiones, para que los prisionero­s puedan mantener el distanciam­iento social exigido en la cuarentena. Su idea es convertir los centros de migración, que son operados privadamen­te y brutalment­e, en cárceles.

Al menos 27 presos han tenido tests positivos en 14 prisiones en el reino. El departamen­to de prisiones reconoció que dos de ellos han muerto. De los guardianes, el 10% está en cuarentena. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina