Los personajes de la literatura argentina tienen quien los dibuje
Tres artistas dibujaron doce personajes y cuatro autores los reseñaron para un libro, que está online.
La idea surgió en una charla de café hace más de un año entre un grupo de escritores, editores, periodistas y personalidades vinculadas a las letras. Que si hay grandes personajes de la literatura argentina, que cuáles son, que quiénes los crearon. La charla terminó en un proyecto del que acaba de conocerse apenas un adelanto: el Álbum de personajes de la literatura argentina rescata a 12 personajes de creaciones nacionales, los ilustra y los acompaña de un texto personal a cargo de cuatro autores. El álbum puede verse online.
Los impulsores de este proyecto, que editó Club Burton, son el escritor Luis
Gusmán y el editor Salvador Gargiulo,
cuyos textos van acompañados por otros del abogado Rafael Bielsa y del crítico y editor Fernando Fagnani. Las ilustraciones corrieron por cuenta de las artistas Noemí Spadaro, María Pinto y Marcela Motta.
Los 12 personajes elegidos para este lanzamiento son Alejandra, de Sobre héroes y tumbas, de Ernesto Sabato;
Alias Gardelito, del libro del mismo nombre, de Bernardo Kordon; Rosa Comte, de El peletero, de Luis Gusmán; el buscador de oro, de Los siete locos, de Roberto Arlt; el coronel y la Eva Perón aludida en Esa mujer, de Rodolfo Walsh; Faustine, de La invención de Morel, de Adolfo Bioy Casares; Ida, de El camino de Ida, de Ricardo Piglia; Julieta y Guido, de La suerte de las mujeres, de Paula Vázquez; La Maga, de Rayuela, de Julio Cortázar; Sandra Opaco, de Un banco a la sombra, de María Moreno; Poli, de El Dock, de Matilde Sánchez, y Rosaura, de Rosaura a las diez, de Marco Denevi.
¿Doce personajes y no están ni el Funes ni la Emma Zunz de Jorge Luis Borges,
ni el Martín Fierro de José Hernández, ni la cautiva de Esteban Echeverría, por mencionar solo algunos? El escritor Gusmán aclara: esto es apenas el comienzo de una serie de álbumes en los que irán apareciendo otros personajes, acompañados por textos de otros autores que ya se están sumando a la iniciativa.
Además, estarán agrupados temáticamente en otros ejes.
En próximas ediciones se abordará, por ejemplo, la muerte del Viejo Vizcacha, que aparece en el Martín Fierro, la de Juan Moreira y la del dirigente Rosendo García que contó Rodolfo Walsh.
Y aparecerán los niños de La gallina degollada, de Horacio Quiroga, entre otros.
Si el proyecto inicial era publicar un libro con unos ochenta personajes y sus respectivas ilustraciones, el coronavirus truncó los planes, pero facilitó el reagrupamiento temático y alentó a concretar una publicación online y gratuita. Hace unos días salió el primer álbum y en los próximos días se irán publicando los otros, también con 12 personajes cada uno.
¿Por qué un álbum? “Es mejor la palabra álbum que diccionario, que es más pretenciosa; el álbum tiene algo de pequeño, de recordatorio infantil como en la escuela”, explica Gusmán, al otro lado del teléfono. El autor de El peletero fue quien creó el personaje de Rosa Comte, homenajeado en la serie que viene de darse a conocer. “El cuadro es acaso el momento siguiente. Rosa Comte está una vez más sola, con la mera compañía de un perro, ubicado al cobijo de su sombra. Un doble acento de la soledad. Nadie la tiene en su mirada, ella ha cerrado los ojos. La cabeza levemente inclinada, rozando la piel del tapado, y las manos embutidas en los bolsillos sugieren un momento de íntima ternura, la breve captura de un recuerdo feliz”, escribe Fagnani sobre el personaje y sobre la ilustración que estuvo en manos de María Pinto.
“Estos perfiles –escribe Gargiulo en la introducción– no tratan de trazar genealogías, ni contrapuntos, ni de hurgar en la obra del autor las recurrencias de personajes análogos, ni menos, mucho menos, pretenden descubrir cuánto se parece el personaje a su propio creador. La mirada surge del propio recuerdo o del efecto ue surge de otra mirada: la de cada ilustradora”.
Noemí Spadaro estuvo a cargo de darle una imagen a Alejandra, la protagonista de Sobre héroes y tumbas, de Ernesto Sabato: “Hubo una época en que todas las mujeres querían ser Alejandra. La palidez, la belleza mal asumida, el sarcasmo, el misterio. El laconismo, que para todo enamorado es misterio”, son las palabras de Gargiulo que acompañan la ilustración de Spadaro.
“Me metí en el texto y en las características que despliega el personaje, es una historia complicada”, señala a Clarín la artista, quien también bocetó a Esa mujer de Rodolfo Walsh. “El texto es tan potente y tiene tal densidad y oscuridad que traté de transmitir el clima siniestro y la figura de esa mujer embelesada y endiosada, tomada por la oscuridad de ese otro personaje”, sostiene quien trabajó con tintas, pasteles, acrílico y hasta con collage en sus producciones, y expuso retratos de escritores argentinos en la Biblioteca Nacional hace siete años.
“Este podría haber sido un libro de arte, una obra de gran formato, pero en realidad es un álbum con breves anotaciones casi al borde del epígrafe”, describeGusmán en el prólogo y completa: “Es posible que cuando el lector vea estos personajes pintados haya encuentros y desencuentros, encantos y desencantos, porque ni ahí se parezcan a cómo se los había imaginado”.
Para ver el álbum, http://gatoenelagua.com.ar/album_personajes.pdf .■