Agüero volvió intacto pero se equivocó y resultó repudiado
Manchester City volvió a sonreír en la Liga Premier. Lo hizo porque le ganó por 1 a 0 a Arsenal en el Etihad. Pero, por sobre todo, porque Sergio Agüero volvió a jugar tras casi cuatro meses inactivo. Tuvo participación vital en el gol del triunfo pero también se equivocó y fue duramente repudiado.
Si se cuenta que Agüero sólo jugó un rato el 24 de junio, cuando se rompió los meniscos de la rodilla izquierda en el partido contra Burnley en la reanudación de la competencia post cuarentena, era medio año el que llevaba sin jugar un partido completo.
En lo futbolístico, más allá de la lógica falta de ritmo, lució intacto. Activo en cada ataque del City, fue gestor del gol. Manejó a la perfección una contra, dejó a Foden mano a mano con el arquero Leno que tapó el remate pero no pudo evitar que Raheem Sterling transformara en grito el rebote a los 22 minutos.
Sin embargo a los 42 minutos, en una jugada de poquísima importancia como un rechazo sobre el costado que derivó en un lateral para Arsenal, Agüero explotó contra la asistente: se le puso de frente, le dijo varios cosas y la terminó tomando del hombro inexplicablemente. A la línea no le gustó la actitud y enseguida la quitó la mano de encima. ¿Será sancionado de oficio?
En el resto de la fecha, Everton y Liverpool empataron 2 a 2 con un polémico gol anulado a la visita en el último minuto a instancias del VAR, Manchester United venció por 4 a 1 a Newcastle como visitante y Chelsea igualó 3 a 3 con Southampton como local.