Apenas 43 burbujas fueron aisladas en los primeros días de clases presenciales
Se trata del 0,1% de las 45.056 que funcionan en la Ciudad. Fue por casos positivos de coronavirus.
En la primera semana de clases presenciales en la Ciudad de Buenos Aires, 43 burbujas sobre un total de 45.056 tuvieron que aislarse por contagios de coronavirus. Otras 45 lo hicieron preventivamente, por casos sospechosos, aunque algunas ya pudieron volver a la escuela porque los testeos dieron negativo. Es decir que en siete días, el 0,2% de las burbujas fue aislada. La información fue confirmada por el Ministerio de Educación de la Ciudad.
El 17 de febrero regresaron a la escuela 370.493 alumnos de primer, segundo y tercer grado de primaria y del mismo ciclo de modalidad especial; de primer y segundo año de secundaria; y de primer y segundo año de escuelas técnicas.
Se trata del 47% de los estudiantes de todas las escuelas públicas y privadas. El resto de los 785.152 alumnos se está reintegrando de manera escalonada. Así, el lunes 22 se sumaron los de los cuatro últimos grados de la primaria.
El "Protocolo para el inicio de las clases presenciales", elaborado por la Ciudad establece que los alumnos deben separarse en burbujas que no pueden tener contacto entre sí.
En Educación dicen que hay 45.056 de estas burbujas. La cantidad de integrantes de cada una es variable, aunque suele coincidir con el grado o el año.
Durante los primeros siete días en las aulas ocurrió algo inevitable en tiempos de pandemia: hubo docentes y alumnos que tuvieron síntomas de coronavirus y dieron positivo en los testeos. Esto no significa que se hayan contagiado en la escuela. Sí indica que fueron a clases contagiados, por lo que hubo que activar un protocolo que no prevé cerrar los establecimientos educativos ante estas situaciones. En cambio, ordena el aislamiento de la totalidad de los integrantes de la burbuja donde apareció el caso positivo.
Hasta el martes a la noche había 43 burbujas aisladas, lo que representa menos del 0,1% del total que hay repartidas entre todas las escuelas de la Ciudad.
Además, desde que comenzaron las clases hubo que aislar a otras 45 burbujs por un caso sospechoso. Aunque estas van retomando la actividad a medida que los testeos a los docentes o alumnos que pueden estar contagiado dan negativo. Entre positivos y sospechosos, entonces, apenas el 0,2% del totalidad de las burbujas tuvo que aislarse.
De acuerdo al Gobierno porteño, desde el 8 de febrero hasta este miércoles fueron testeadas 20.835 personas, entre personal docente y no docente de las escuelas, en los tres centros destinados a ese fin. Fueron 304 las que dieron positivo, lo que representa el 1,7% del total de las que pasaron la prueba.
Desde Educación explican, sin embargo, que los que dan positivo en esos centros deben someterse a un test PCR para corroborar el contagio.
Y dicen que, hasta ahora, entre los que hicieron estos PCR y volvieron a dar positivo, más los casos confirmados por obras sociales y prepagas de docentes y alumnos, se verificó la existencia de 198 contagiados.
¿Qué pasa ante un contagio? El protocolo establece que cuando un alumno, docente o trabajador manifiesta síntomas en la escuela, debe ser aislado en la misma institución, en algún lugar especialmente identificado. Si los síntomas aparecen antes de llegar a la escuela, las familias de los chicos deben enviar una declaración jurada manifestando la situación y una constancia médica.
Y el personal docente y no docente tiene que solicitar licencia y adjuntar también su constancia médica.
Mientras se espera el resultado de los testeos, todos deben estar aislados. Es decir, toda esa burbuja y las otras a las que esté destinado ese maestro o maestra.
Cuando se confirma un caso, toda la burbuja debe quedar aislada durante 10 días corridos. En el caso de las personas con síntomas, se cuentan a partir del día en que les aparecieron. Pero si la persona es asintomática, el plazo corre a partir de la fecha del testeo.
Este plazo de diez días de aislamiento es el que deben cumplir las 43 burbujas en las que se detectó un caso positivo. Desde el Ministerio de Educación de la Ciudad aseguran que las escuelas están obligadas a garantizar la continuidad pedagógica y que por lo tanto, durante el tiempo de aislamiento los estudiantes deben seguir las clases en forma virtual. ■