Las legislativas fortalecerían el poder de Bukele en El Salvador
Los salvadoreños acudieron ayer a las urnas para elegir a las nuevas autoridades municipales y legislativas, en unos comicios que podrían fortalecer al presidente Nayib Bukele pese a las fuertes críticas que ha recibido por su forma de gobernar.
Aunque su nombre no apareció en las boletas, la figura del líder de 39 años dominó en la campaña y todos los sondeos vaticinaban que su partido Nuevas Ideas obtendría el control del Congreso de 84 escaños y la mayoría de las alcaldías. Sus opositores han advertido que la democracia en el país está en peligro por lo que consideran una forma autoritaria de gobernar del líder salvadoreño. Los resultados se conocerían hoy.
En febrero de 2020, Bukele presionó a los diputados para que aprobaran un millonario préstamo para combatir la delincuencia y los convocó a una sesión plenaria, pero los legisladores opositores no se presentaron. Entonces el mandatario llegó al Palacio Legislativo acompañado de militares y policías fuertemente armados. A partir de allí la convivencia entre el Legislativo y el Ejecutivo ha sido imposible.
Euardo Escobar, de la ONG Acción Ciudadana, advirtió ante AP que una victoria de Nuevas Ideas “profundizaría el autoritarismo del gobierno de Bukele”, aunque reconoció que la popularidad del mandatario es casi tan alta como el rechazo a los partidos tradicionales porque “en los 30 años de su gobierno la gente no ha visto mejoras en sus vidas”.
La contienda es vista también por muchos como un referendo sobre si se debe dar a Bukele el control del Legislativo,
dominado por opositores, para que pueda impulsar sus iniciativas. Participaron de la elección diez partidos políticos, pero todas las encuestas colocan como amplio favorito a Nuevas Ideas. Muy atrás aparecen la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que en los últimos 30 han se han repartido el poder.
Arena -que gobernó 20 años (19892009)y que ha mantenido el control de la mayoría de las alcaldías y controlado las decisiones en el Congreso, estaría pasando su peor época y, según las proyecciones, quedaría muy reducida.