Clarín

En la intimidad de la gira, Fernández pone el foco en la política doméstica

En la medianoche parisina, el Presidente charló con su comitiva sobre la elección de este año y de qué hará María Eugenia Vidal. Cruce de mensajes con CFK.

- Federico Mayol fmayol@clarin.com

Alberto Fernández, dicen sus colaborado­res, está cansado. El periplo es intenso: poco más de un día en Lisboa, y menos de 48 horas entre Madrid y París. Pero el balance positivo de algunas de las principale­s potencias europeas -gestual, por ahora-, y la expectativ­a de volver a Buenos Aires con un encuentro cara a cara con la directora del FMI, y avances en las negociacio­nes con ese organismo y el Club de París, lo entusiasma­n.

Estar a un océano de distancia con las urgencias de su gestión, que aquí en París resultan lejanas, también lo satisface. Cruzó unos mensajes de teléfono con Cristina Kirchner, los únicos desde que llegó a Europa, vinculados a las conversaci­ones con Antonio Costa, el premier portugués, que apoyó la postura argentina ante el Fondo.

La relación con la vicepresid­enta siempre es motivo de versiones. "Eso es para inseguros", se atajan desde este continente. La distancia revitaliza al menos por unos días.

París está desierta. Rige el toque de queda desde las 7 de la tarde. El restaurant del hotel Prince de Galles está cerrado. No hay servicio de café. Nadie pasea por el lobby, con excepción de un puñado de custodios de Casa Militar que se turnan entre la planta baja y el cuarto piso, donde se hospedan los funcionari­os.

En un apartado que cedieron especialme­nte, el jefe de Estado, recién vuelto de la cena de bienvenida organizada por el embajador Leonardo Constantin­i, charla un rato más con algunos de sus colaborado­res antes de dormir. La gira está atravesada por el FMI, el Club de París y la audiencia de hoy con el Papa Francisco. Pero la política local, según trasciende, se cuela en la medianoche del martes de París.

Aparece, entonces, el nombre de María Eugenia Vidal, la ex gobernador­a bonaerense que después de más de un año de silencio encontró en la publicació­n de un libro la excusa pamitiva ra volver a la política electoral. Fernández desmenuza junto a los funcionari­os y amigos el escenario electoral de este año, atravesado íntegramen­te por la campaña de vacunación que, pareciera, empieza a cobrar algo de vigor.

“Vidal es inteligent­e, no va a ser candidata en la provincia de Buenos Aires. Ojalá lo sea, es muy fácil discutir lo que dejó en la Provincia”, analiza el jefe de Estado junto a su mesa chica, según reconstruy­e Clarín.

Para el “albertismo”, que copó la cooficial, la elección en la Provincia se gana sin despeinars­e. Lo mismo que la región Norte del país, que, sumadas todas las provincias, configuran, en términos electorale­s, “otra provincia de Buenos Aires”.

Hay inquietud por los posibles resultados de Santa Fe y Entre Ríos, dos distritos peronistas en los que la oposición no hace agua, abundan desde la delegación europea. Mendoza, Córdoba y la ciudad de Buenos Aires, es decir, la zona centro, están perdidas.

Son las jurisdicci­ones favoritas de la oposición.

Según se desprende de esa charla de café sin café en la madrugada de París, el resultado alcanzaría sin embargo para ganar. “¿Qué significa ganar para ustedes?”, se preguntarí­a después a la comitiva. “Ganar es ganar por un voto”, responderí­an.

Un par de horas antes, la ministra Carla Vizzotti anunció en Buenos Aires que la empresa AstraZenec­a llevará a la Argentina casi 4 millones de dosis antes de fin de mes. El mandatario lo habló por teléfono con el canciller mexicano Marcelo Ebrard, que además le garantizó otra partida de vacunas fabricadas en México, entre el 25 de mayo y fines de junio.

La vacunación no figura en el menú oficial de la visita a Portugal, España, Francia e Italia. Pero sí sobrevuela todas las conversaci­ones: en Lisboa, en Madrid, en París y, probableme­nte, en Roma.

En la delegación no quieren predecir el impacto electoral, si toma envión, de la campaña de inmunizaci­ón: “Es imposible saberlo”.

Sí están convencido­s de que el resultado de este año será bueno. “Estamos bien”, se escucha entre los integrante­s de la delegación.

El único que casi no habla de los problemas domésticos, abocado a tiempo completo a las negociacio­nes técnicas con el Fondo Monetario y el Club de París, es Martín Guzmán. En realidad, el ministro casi que no habla de nada: es, por lejos, el más introverti­do de la comitiva. Tiene serios motivos. No solo su dedicación a resolver la deuda: la pelea palaciega con el kirchneris­mo por la renuncia fallida del subsecreta­rio Federico Basualdo lo hizo tambalear políticame­nte.

“Fue un problema de egos, ya está”, deslizan cerca del Presidente.

 ?? NOEL SMART ?? Fotos. El Presidente llega ayer a la embajada argentina en París, donde se reunió con empresario­s.
NOEL SMART Fotos. El Presidente llega ayer a la embajada argentina en París, donde se reunió con empresario­s.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina