Las empresas de consumo masivo también tienen cita en La Plata con Kicillof
El gobernador convocó a fabricantes de insumos y productos. También participa Augusto Costa.
Las sospechas que apuntan a una
creciente influencia del gobernador Axel Kicillof y su gente de confianza sobre la gestión económica del gobierno nacional se consolidan. Lo más saliente que se había visto hasta ahora era cierta autonomía de la secretaria de Comercio, Paula Español, especialmente en todo lo que tiene que ver con la presión que la normativa redactada en ese organismo aplica sobre las empresas, sobre todo las productoras de bienes de consumo masivo.
Esta semana se sumó más evidencia. El propio Kicillof convocó a reuniones, en La Plata, a directivos de
supermercados y de empresas productoras de insumos difundidos y bienes de consumo masivo como alimentos, bebidas y artículos de higiene y limpieza, según informó este miércoles la gobernación de la Provincia de Buenos Aires.
La excusa formal de la convocatoria, comprometerlos en la ampliación del programa Comprá Más Cerca, iniciativa de la Provincia que acuerda precios de referencia para artículos esenciales en comercios de proximidad, con el objetivo de promover una mayor variedad de productos y multiplicar los comercios adheridos.
En una de las reuniones Kicillof no pudo asistir y en su lugar el que ofició de anfitrión fue Augusto Costa,
ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica.
Costa estuvo, por ejemplo, en el encuentro con empresas productoras de alimentos y artículos de limpieza.
Dos definiciones iniciales de Costa sorprendieron a los invitados. Una:
“No voy a reemplazar al ministro de Economía, Martín Guzmán”. La otra:
“Yo se que ustedes no son los únicos responsables de la inflación”.
Fue una manera de “romper el hielo”. De Guzmán no se habló más. Pero sí de inflación, y de las distintas visiones sobre cómo bajarla, sí.
Costa aclaró que quería tomar contacto con las empresas para refrescar una relación que había cortado en 2015 -ocupaba el mismo cargo que hoy ocupa Paula Español- y dijo que estaba dispuesto a escuchar opiniones de las empresas.
La conversación, dijeron fuentes que asistieron al encuentro, fluyó por varios puntos porque no había agenda determinada, si bien en lo formal se había hablado del plan “Comprá más cerca”.
Allí fue entonces cuando surgió, previsiblemente, la observación sobre la fuerte suba de costos que no pueden ser trasladados a precios por la vigencia de los precios cuidados y precios máximos para determinados productos de la canasta familiar.
Costa retrucó señalando que las empresas bien podía sentirse “privilegiadas” porque al ser definidas como “esenciales” pudieron seguir trabajando durante toda la cuarentena.
Desde ya, se habló de la creciente presión fiscal y de las ganas, pero también la imposibilidad, de aumentar la producción pese a que las empresas están operando al 50 o 60% de su capacidad. En ese punto, Costa observó que las compañías tenían que balancear el año malo para sus balances con los buenos balances “que lograron durante el gobierno anterior”. También se habló de precios, desde ya, y la suba de valores de ciertos insumos, como el aluminio y el cartón para los envases. La convocatoria fue sumamente amplia, lo cual llamó la atención de los convocados.
Según informó la gobernación, dieron presente ejecutivos de todas las cámaras de supermercados, autoservicios y mayoristas, también de la Federación de Almaceneros bonaerenses. También autoridades de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), incluyendo representantes de Arcor, Molinos Río de la Plata, Unilever y Procter & Gamble; de Molto / Marolio; de Morixe; de LaDolce; de Queruclor; y de Dulcor, de Acindar y Ternium.
Los invitados se fueron con la sensación de que la mano de Kicillof se extiende más allá de la Provincia.w