Condenan a un narco que estuvo prófugo y tenía una vida ostentosa

Con una condena por narcotráfico y aun prófugo de la Justicia, en 2018, Walter Oscar Ledesma, de 45 años, no se ocultaba en redes sociales. Por el contrario, desde una playa del Caribe se mostraba despreocupado sobre la situación judicial que lo esperaba en el país. Tres años después, su presente es bien opuesto.

El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Bahía Blanca acaba de condenarlo a doce años de cárcel por liderar una banda dedicada a la venta de drogas en la ciudad. La sanción, unificada con aquella inicial que no cumplió, se eleva a 17 años de prisión para uno de los jefes narco más importantes de la región.

Una pena mayor (22 años) le había pedido el fiscal Gabriel González Da Silva, como “organizador de acciones de tráfico de estupefacientes en la modalidad de comercio, agravado por la intervención organizada de tres o más personas”. Cuatro de ellas también recibieron condenas por parte del Tribunal bahiense.

Ledesma había llegado preso al juicio iniciado en junio pasado, tras entregarse a la Justicia a fines de octubre de 2018, cuando se vio cercado. Días antes, en el altillo de una cabaña a su nombre en el balneario de Monte Hermoso, le habían encontrado 1.600.000 dólares y 5 mil euros.

En varios allanamientos secuestraron, además, 240 mil pesos, armas, camionetas y autos. Al poco tiempo, en una lancha que guardaba en un galpón alquilado en Bahía Blanca, le hallaron cerca de ocho kilos de cocaína y elementos para fraccionarla.

En otras propiedades de Ledesma, también había otros vehículos y motos de alta gama, pero ningún rastro del narco, que arrastraba, ya por entonces, una condena a siete años de cárcel. Fue decidida en 2017, después de que le encontraran en su casa cerca de ocho kilogramos de droga y 300 mil pesos sin justificar.

Con el fallo aún sin confirmar, el narco logró la excarcelación y burló una de las condiciones que le exigía la Justicia para darle el beneficio: la que disponía que, cada 30 días, debía presentarse ante la delegación de la Policía Federal, en Bahía Blanca.

Lo que solo era evidente a los ojos del expediente judicial se hizo viral a partir de que trascendieron fotos del capo narco, sonriente y saludando, en una playa del Caribe. Un fiscal decidió acortar a 15 días el plazo para que se presentara en la repartición.

Ledesma, vinculado con proveedores de droga del conurbano bonaerense, tampoco cumplió y fue declarado prófugo. La investigación avanzó, derivó en los allanamientos de octubre de 2018 y precipitó su entrega.

Antes de ser llevado a declarar descubrieron 7 kilos de cocaína, dos kilos de marihuana, 40 kilos de precursores químicos, 25 armas cortas y más de 600 municiones en una Ford Ranger. Al mismo tiempo, la Justicia fue estableciendo el rol que tuvieron los demás integrantes de la banda.

Andrés Abelardo Sáez fue condenado a ocho años de cárcel y Rubén David Kraser, a siete años. A Sáez lo vincularon con el secuestro de la camioneta, que los investigadores hallaron en una cochera del microcentro bahiense, antes de que Ledesma se entregara. Por otro lado, Damián Esteban Rapezza recibió una pena de dos años y seis meses y Gisela Celeste Kraser, hermana de Rubén, otra de un año. En ambos casos, por tenencia ilegal de armas, al margen de la acusación por narcotráfico.

Nadia Solange Córdova Arcuri fue absuelta, según anticipó el Tribunal, que dará a conocer el 12 de noviembre los fundamentos del fallo.w

Walter Ledesma, de 45 años, lideraba una banda dedicada a la venta de drogas en Bahía Blanca.