Macri defendió un proyecto que impide suspender las clases si hay paro
Mauricio Macri defendió ayer la iniciativa de un diputado del PRO para que la educación sea declarada un "servicio estratégico esencial" y lo hizo deslizando una crítica a los gremios.
En Twitter, el ex presidente elogió la propuesta del ex ministro de la cartera educativa en su gobierno Alejandro Finocchiaro y señaló que implicaría que las clases no pueden "interrumpirse nunca, incluso cuando un gremio decida parar".
"Declarar a la educación como un servicio estratégico esencial -como los hospitales o la distribución de agua- significa que no puede interrumpirse nunca, incluso cuando un gremio decida parar. Acompaño este proyecto para asegurar que los chicos no pierdan un solo día de clases", escribió Macri.
El proyecto presentado por Finocchiaro "busca garantizar los derechos de niños, niñas y adolescentes que deben alcanzarse durante el ciclo lectivo", según informó el propio legislador bonaerense, y "señala a la educación como derecho humano, acceso primario y sustancial a los derechos sociales, económicos y culturales".
La premisa de la propuesta es que el calendario escolar es de obligatorio cumplimiento en forma presencial y será responsabilidad de las jurisdicciones conseguirlo como “piso”.
Para que se pueda llevar a cabo, Finocchiaro plantea "la creación de guardias docentes y no docentes que deberá implementar la dirección de cada uno de los establecimientos escolares de los tres niveles obligatorios".
"Esas guardias sostendrán el proceso educativo en los días de clases afectados por medidas de acción directa, indirecta, paro o huelga docente y no docente durante el ciclo lectivo", destacó el ex ministro.
También advierte que si por algún motivo no se llegara a cumplir el calendario, "serán las jurisdicciones o los establecimientos afectados los encargados de instrumentar lo necesario para alcanzar los días de clases presenciales previstos en el receso de invierno o en diciembre”. En ese caso, el Consejo Federal de Educación fijaría las medidas necesarias para que las provincias dispongan la organización de las instituciones educativas de acuerdo a los nuevos criterios generales, que se adecuarán a los niveles y modalidades educativas.
Precisó el legislador que "sin dudas el apagón educativo demostró a todos que la presencialidad escolar es la instancia en la que los chicos acceden a un sinnúmero de derechos. El primero de ellos es el aprender, pero las aulas también garantizan otros que tienen que ver con la salud integral, con el desarrollo socio-afectivo, con la construcción de ciudadanía plena, con la protección y el cuidado que los adultos les debemos a los menores de edad".
Y remarcó: "Una escuela cerrada es una barrera que viola lo que dispone la Constitución Nacional. Esta iniciativa pretende que, en la práctica, confirmemos lo que se declama. La única manera de posibilitar el desarrollo individual de cada uno de los estudiantes y tener un destino como sociedad es superar la tragedia educativa que nos toca vivir". ■