Tragedia de Palermo: los límites y la salud de los choferes profesionales
El conductor del taxi que arrolló a las estudiantes tiene 74 años y sufrió una descompensación. La opinión de médicos y expertos en seguridad vial.
"Me desvanecí... no sé qué me pasó". El taxista José Rogelio Parrondo se agarra la cara con ambas manos y deja caer su cabeza sobre el volante. Un video muestra los minutos posteriores al incidente vial que protagonizó este conductor de 74 años. En la esquina de Santa Fe y Armenia, en Palermo, atropelló a tres jovenes francesas; una permanece internada -sin riesgo de vida-, otra fue dada de alta, pero una de ellas falleció el domingo.
Una fiscalía porteña inició la investigación. Luego de la muerte de una de las estudiantes, la causa fue caratulada como homicidio y pasó a la Justicia nacional.
El incidente generó impacto en la opinión pública. No sólo por la tragedia, también por la edad del conductor, las particularidades que atraviesa el sector del servicio de taxis en la Ciudad, las habilitaciones para conducir en la post pandemia y los adultos mayores que continúan trabajando, en muchos casos por la crisis.
“Lo primero que debemos preguntarnos es cómo hacen para llegar a fin de mes 5 millones de argentinos que hoy cobran la jubilación mínima. Esto explica buena parte del trabajo informal”, sintetizó Eugenio Semino, Defensor del Adulto Mayor de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad.
“La gran preocupación de los adultos mayores es la libertad. Pero qué pasa cuando la expectativa de vida indica que a los 70 años quizá quedan 20 o 15 años más. ¿Los viejos pueden quedar atados a una jubilación que se diluye ante la inflación? Claro que no, por eso vuelven al trabajo, pero a la informalidad”, reflexiona Semino.
Jota Leonetti es especialista en seguridad vial y entiende que la pandemia puso en stand by una serie de controles vitales: se suspendieron los exámenes de aptitud - regresaron en abril- y se otorgaron prórrogas. “El paso de todo este tiempo en una persona de edad puede condicionar sus aptitudes. Nos debemos el debate sobre el límite de edad en las licencias de conducir profesionales”, advirtió. La norma indica que hay que tener un mínimo de 21 años para conducir un taxi, pero no hay límite de edad.
Sobre el trabajo de los choferes que no son propietarios de sus autos, Leonetti reflexiona: “Pensemos que los peones pasan muchas horas al volante, más de 12. Se puede llegar a conducir sin tener noción de la tarea, por repetitiva y sistemática; con somnolencia, fatiga y hastío”.
“Hoy el alquiler de un auto está en torno a los 5.000 y 6.000 pesos por día. Un peón arranca su día debiendo esta suma. A esto hay que sumar gastos. Para cubrirlo hay que trabajar en la calle un mínimo de 12 horas”, explicó a Clarín el encargado de dos importantes empresas de radio taxis.
“No estamos tomando peones mayores de edad. Sí tenemos asociados a nuestra radio adultos mayores propietarios. Antes decían que trabajaban unas horas porque no podían estar alejados de la calle y para hacer ‘algo’; ahora, además, porque es un dinero que los ayuda”, confió.
Las aplicaciones son otro mercado para muchos adultos mayores. Beat es una de ellas (opera principalmente en el Area Metropolitana) y comparte con este medio datos y punto de vista sobre esta coyuntura. Tienen 145 mil conductores registrados: 96% son varones, el 27% de ellos tiene entre 45 y 54 años y el 14%, más de 54 años (el 41% de los taxistas que la utilizan tienen más de 55 años). “Según las encuestas que realizamos entre conductores, para el 71% significa su principal fuente de ingresos. Y valoran la flexibilidad y la independencia”, explicó Patricia Jebsen, gerenta general de Beat en Argentina.
Según los datos de la Secretaría de Transporte y Obras Públicas, hay 30.700 conductores de taxis activos. De ellos, 4.061 tienen más de 70 años: 3.366 son conductores titulares y el resto, conductores no titulares (peones contratados, como Parrondo).
Aclararon desde la Ciudad que “el circuito psicofísico y las capacitaciones en seguridad vial y género, anuales y que con la pandemia se prorrogaron, ya se retomaron”.
El doctor Julio Nemerovsky, presidente de la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría (SAGG), aporta: “Desde el punto de vista físico, orgánico y cognitivo, un hombre de 74 años puede estar en condiciones para manejar y ser productivo”. Señala que un ACV “se da con mayor incidencia entre los 50 y 60 años”. Y opina: “La edad no debe ser un limitante,
En la Ciudad hay 30.700 conductores de taxi activos. De ellos, 4.061 tiene más de 70 años.
sino que deben serlo los controles”.
“Si es jubilado y trabaja porque no le alcanza, es complejo e injusto. Pero deberíamos preguntarnos por qué, por ejemplo, un profesor universitario a los 70 años debe jubilarse, cuando es el momento en el que tiene los mayores recursos para desarrollar su actividad docente”, indaga. ■