Cómo embaucar a los nazis
Colin Firth encabeza este drama bélico sobre un hecho increíble ocurrido en la Segunda Guerra Mundial.
Drama bélico. Gran Bretaña/ EE.UU., 2021. Título original: “Operation Mincemeat”. 127', SAM 13. De: John Madden. Con: Colin Firth.
Disponible en: Netflix.
Todo lo que cuenta El arma del engaño es verídico, aunque cueste creerlo. Si hasta entre los protagonistas del engaño a los nazis aparece Ian Fleming, que luego crearía a James Bond...
Pero ¿en qué consistió la Operación Carne picada?
¿Y es El arma del engaño una película de guerra?
Ni.
Corría 1943 cuando Hitler dominaba todos los escenarios de la Segunda Guerra Mundial, y los aliados no sabían cómo detenerlo. Planeaban una operación anfibia, la mayor imaginada -faltaría para el Día D en Normandía-, desembarcando en la isla de Sicilia, en Italia. Pero para tener éxito, las tropas nazis no deberían estar allí, por lo que la Inteligencia británica creó un engaño.
La idea era hacerles creer a los nazis que en vez de atacar por Sicilia, lo harían por Grecia.
Pero para convencerlos idearon un plan, que llevaron a cabo Ewen Montagu y Charles Cholmondeley, aquí interpretados por Colin Firth y Matthew Macfadyen.
Como esta es una historia de recontraespionaje, contaban con que si arrojaban un cadáver cerca del puerto de Huelva, en España (que era neuJean tral en el conflicto, pero estaba invadida por espías alemanes y británicos), que tuviera entre sus pertenencias papeles falsos acerca del desembarco en Grecia, estos llegarían a manos nazis y se tragarían el anzuelo.
Suena y parece descabellado, tanto como para que el propio Winston Churchill, primer ministro británico, dijera que era ridículo, pero por eso mismo le resultaba factible que los mandos nazis se lo creyeran.
La película de John Madden (Shakespeare apasionado, El exótico Hotel Marigold) reconstruye las acciones, pero dándoles énfasis a las relaciones entre Ewen y Charles y metiendo la púa con Jean Leslie (la escocesa Kelly Macdonald), una agente del MI5 de quien colocan una foto en la ropa del cadáver para hacerla pasar por su novia.
Toda la subtrama de cómo consiguen el cuerpo de un vagabundo y lo transforman en el falso capitán William Martin daba para una película en sí misma. Y Madden lo relata con detalles, lo que a la vez le permite jugar con un triángulo amoroso, que nunca llegó a concretarse, entre los tres personajes principales.
era viuda, la esposa e hijos de Ewen habían emigrado a los Estados Unidos -todo indicaba que no había ya amor en ese matrimonio- y Charles veía con malos ojos cómo Ewen y Jean “creaban” entre sí la historia del falso capitán y su falsa novia Pam.
Respondíamos a la pregunta de si El arma del engaño era una película de guerra con un “ni”, porque claramente es el trasfondo, pero la cámara de Madden casi no se mueve de los interiores de Londres. Y habla de esa otra guerra, la que se entabla entre espías, pero también entre los propios ingleses, por sus desconfianzas mutuas, que pueden incluir héroes de guerra y también algún hermano con simpatías rusas...
Firth, desde El discurso del rey, sabe cómo manejarse en estas esferas, y si nos referimos a las del espionaje, bueno, vean las dos Kingsman. Poco a poco se está convirtiendo en el Tom Hanks británico. En cuanto a Matthew Macfadyen, es cierto que su personaje en Succession parece haberlo reformateado, y cuando vemos a Charles no podemos olvidarnos de Tom Wambsgans. Pero por cómo actúa, esa similitud es perdonable. ■